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Campo de Gibraltar

El PSOE lleva al Congreso el cese del subdelegado del Gobierno

Por sus polémicas manifestaciones sobre el contrabando y la plantilla municipal de La Línea. Han registrado en el Congreso una batería de preguntas al Gobierno para conocer si respalda al subdelegado, máxime cuando ahora “tiene el cinismo de negar unas acusaciones que están grabadas” .

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  • González Cabaña, PSOE -

El diputado socialista por la provincia de Cádiz, Francisco González Cabaña, ha registrado una batería de preguntas en la Cámara Baja en las que plantea al Gobierno si respalda al subdelegado del Gobierno, Javier de Torre, o por el contrario contempla su cese a raíz de las manifestaciones que realizó a la prensa en las que ligó el impago de las nóminas de los trabajadores municipales de La Línea con la práctica del contrabando de tabaco en la Aduana”.

González Cabaña considera que “el Gobierno del PP no puede, al más puro estilo Rajoy, permanecer impasible y condescendiente ante las graves manifestaciones realizadas por el subdelegado, máxime cuando niega ahora que el pasado 28 de marzo vinculara el contrabando en la Aduana con los impagos de sus nóminas por parte de la plantilla municipal de La Línea. Todo el mundo ha podido escuchar hoy en los medios de comunicación la grabación de sus palabras que no admiten duda alguna sobre lo que dijo. Es muy cínico querer negar la evidencia”, ha resaltado González Cabaña.

Las preguntas registradas por el diputado socialista en el Congreso plantean al Gobierno si comparte las afirmaciones del subdelegado en las que dijo estar convencido de que, a raíz del anticipo de la PIE al Ayuntamiento, el pago de nóminas atrasadas iba a disminuir las colas en la Aduana porque, según expresó de manera literal, “(...) muchísimas familias que no tenían los fondos que aporta una nómina constante durante diez y ocho meses van a dejar en muchas ocasiones de tener que depender de esa economía de subsistencia que se producía en la Aduana de La Línea y, por lo tanto, podremos ver cómo disminuirán también seguramente estas colas y se puede normalizar la situación de La Línea".

Para González Cabaña, la situación del subdelegado en la provincia de Cádiz es “insostenible para el Gobierno”. “Primero por la infinita gravedad de sus acusaciones y ahora por querer mentir a la opinión pública asegurando que no tiene que disculparse de unas palabras que asegura que no ha dicho pero que están grabadas”.

Por ello, el diputado socialista considera “urgente” que el Gobierno responda a la pregunta que el propio González Cabaña ha registrado en el Congreso para saber si contempla el cese del subdelegado, una pregunta que se registró la pasada semana en la Cámara Baja pero que cobra aún más sentido a raíz del fallido intento de desmentido realizado por Javier de Torre en la jornada de ayer.

“Todo este cúmulo de despropósitos de Javier de Torre con respecto a La Línea no son fruto de la casualidad, aunque sí de la incompetencia y la ceguera partidista, porque demuestra que no actúa como representante de la Administración del Estado sino como un comisario político y un ariete del PP en su estrategia de tratar de desgastar a la alcaldesa Gemma Araujo. Esa es la razón última que mueve a Javier de Torre y que le inhabilita como subdelegado del Gobierno en la provincia”, ha subrayado González Cabaña, que también ha preguntado al Gobierno si comparte sus afirmaciones en las que culpaba al Ayuntamiento de La Línea de no haberse llegado antes a un acuerdo para aprobar el Plan de Ajuste Municipal.

El diputado socialista considera que, “además de la falta de lealtad institucional hacia el Ayuntamiento de La Línea,  no deja de ser curioso que Javier de Torre, que tanto utiliza la excusa de la herencia recibida para justificar la acción del Gobierno del PP, no aplique esa misma doctrina de la herencia recibida para valorar la situación en la que el PP dejó La Línea y el Ayuntamiento tras la desastrosa gestión de Juárez y de Alejandro Sánchez. Ya vemos que la prudencia no es una virtud precisamente del subdelegado, porque si tuviera ese mínimo de prudencia y responsabilidad institucional no habría ensuciado la imagen de la ciudad de La Línea y de sus trabajadores municipales”.

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