El Ayuntamiento de Chiclana incentivará la actividad económica y la creación  de empleo en el municipio a través de las ordenanzas fiscales para 2014, según ha anunciado hoy el primer edil, Ernesto Marín, durante la presentación del proyecto de ordenanzas elaborado por el equipo de gobierno y que será llevado al próximo pleno municipal. Unas actuaciones que, ha añadido, “pone de relieve el compromiso municipal por aplicar los recursos a su alcance para reactivar la economía de la ciudad, de manera que llegue a los hogares chiclaneros, así como llevar a cabo una bajada paulatina de impuestos en el municipio”.

Así, según ha explicado el regidor chiclanero en el transcurso de una rueda de prensa en la que ha estado acompañado por las delegadas municipales de Urbanismo y Hacienda, Marisol Ayala y Ascensión Hita, “se bonificará el Impuesto de Construcciones (ICIO) a las empresas que contraten personal durante dos años”. Una medida que, ha agregado, “pretende ayudar a un sector económico clave en Chiclana, al tiempo que servirá para atraer nuevos inversores a la ciudad, demostrando que esta ciudad es un lugar atractivo para invertir”.

Estas bonificaciones oscilarán entre una rebaja del veinte por ciento en el  caso de que las contrataciones oscilen entre las cinco y las diez personas; del treinta por ciento para contratar entre once y cincuenta trabajadores; y del cincuenta por ciento en el caso de que se creen más de cincuenta puestos de trabajo. A este respecto, Ernesto Marín ha resaltado que “se trata de una medida importante ya que el importe del ICIO es del 3,27 por ciento del coste de la edificación, por lo que esta bonificación podría repercutir positivamente también en el precio de las viviendas”.

Asimismo, el primer edil ha destacado que este plan de medidas fiscales para favorecer la actividad económica y, por lo tanto, colaborar en la creación de puestos de trabajo en el municipio, contempla además “una bonificación del treinta por ciento en este impuesto en aquellas obras referentes a Viviendas de Protección Oficial, así como del noventa por ciento en aquellas obras que favorezcan la accesibilidad y habitabilidad de las personas con algún tipo de discapacidad y de los mayores”.

En esta misma línea, ha resaltado que otro impuesto que se verá beneficiado de la bajada del 27 por ciento de los valores catastrales serán el impuesto de transmisiones patrimoniales, “lo que favorecerá la compra venta de viviendas o locales y, por tanto, la actividad empresarial”.

Además, ha agregado que esta propuesta de modificación de las ordenanzas fiscales congela el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica, más conocido como impuesto de circulación, y tasas municipales como basura, aguas, expedición de documentos, retiradas de vehículos y licencias matrimoniales.

En esta línea, el alcalde de Chiclana ha destacado la bajada generalizada de las tasas deportivas, gracias al cambio radical aplicado a las ordenanzas relativas al uso de las instalaciones deportivas, fomentando la utilización de los bonos, tanto el familiar como el Bono 10. Estas bajadas contemplan la bonificación de un treinta por ciento a personas mayores de 65 años o con alguna minusvalía, o jóvenes de entre 16 y 21 años. Asimismo, ha explicado que esta rebaja tendrá especial incidencia en las actividades con monitor y en deportes como el padel o el tenis, fomentando la práctica de estas disciplinas, que contarán a mediados de 2014 con la creación del “Padel & Tenis Center Chiclana”.

Cabe recordar que, además de estas actuaciones, el proyecto de nuevas ordenanzas fiscales para 2014 contempla como medida más destacada una rebaja del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que afectará a todos los chiclaneros, por una cuantía media que podría situarse en el 6,5 por ciento.

Asimismo, el Ayuntamiento de Chiclana bonificará hasta un cincuenta por ciento este impuesto a las entidades que sean declaradas de especial interés o utilidad pública, por concurrir en ellas circunstancias sociales, culturales, histórico-artísticas o de fomento del empleo; reduce en un 27 por ciento el impuesto sobre el incremento del valor de los terrenos de naturaleza urbana, más conocido como plusvalías; mantiene el tope de 90.000 euros en el valor catastral de las viviendas para que las familias numerosas puedan acogerse a la bonificación del cincuenta por ciento del IBI; así como el plan personalizado de pago de impuestos y tributos municipales, que facilita su abono en cuatro plazos sin recargo y con una bonificación del dos por ciento si se domicilia su pago en alguna entidad financiera.