El cambio de criterio en los requisitos de concesión de la Bandera Azul por la Asociación ADEAC, encargada del otorgamiento de este galardón en España, es la principal causa de que el distintivo ondee en el año 2017 en La Barrosa pero no en la playa de Sancti Petri. En este sentido, el delegado de Medio Ambiente y Playas, Joaquín Páez, lo ha argumentado en convocatoria de prensa indicando que “Sancti Petri contará en 2017 con una calidad igual o superior a la de 2016 en servicios y calidad de agua, exactamente igual que La Barrosa. Sin embargo, el cambio de norma de Bandera Azul establece que los vertidos que se produzcan no ya en la playa, sino en el municipio, cuenten con unos niveles de nitrógeno y fósforo por debajo del parámetro que ADEAC establece”.
Páez ha aclarado que “en Chiclana no existen vertidos de agua no tratada como tales, sino que el efluente de agua depurada de la EDAR de El Torno llega al río Iro y el de La Barrosa al arroyo de Carrajolilla aunque en ningún caso a la playa de Sancti Petri directamente. No obstante, aún siendo niveles aceptables a nivel medioambiental y que garantizan la calidad del agua, las EDARs no tienen capacidad suficiente para limitar los niveles de nitrógeno que la Bandera Azul exige, aunque sí cumplimos los de fósforo”.
El edil ha apuntado que “se necesitarían de dos a tres veces el nivel actual de eliminación de nitrógeno para situarse por debajo de los parámetros de Bandera Azul, lo que requeriría de una inversión de 7 millones de euros en obras entre las dos depuradoras”. Además, ha especificado que “desde Chiclana Natural se lleva años trabajando en estudiar las posibles remodelaciones necesarias en colaboración con la Junta de Andalucía, pero lo cierto es que con las dos EDAR actuales no hay atisbo de impacto ambiental. Aún así seguiremos trabajando por lograr las mejoras necesarias”.
El responsable de playas ha aludido “al exigente control técnico y vigilancia constante a la que se someten las aguas de ambas depuradoras, así como a un estudio externo de la Universidad de Cádiz que certifica la inexistencia de problemas de contaminación, tanto en el río Iro como en Carrajolilla”. A ello ha sumado “los 44 muestreos de calidad de agua en playas que incrementan los que se venían realizando el año pasado y que dieron fe de que en La Barrosa y Sancti Petri la calidad del agua es excelente. Esta circunstancia se vio reflejada además en las auditorías de calidad de la ISO 14.001 Y Q de Calidad que se superan anualmente, a las que ahora se añadirá la certificación europea EMAS”.
Como valoración personal, ha considerado que “no se trata de una decepción porque no existe un trabajo mal hecho y menos en una ciudad comprometida ambientalmente como Chiclana, con dos depuradoras y con un compromiso en materia de playas extraordinario; pero sí considero injusto que la labor que se viene realizando durante todo el año para incrementar la excelencia en las playas se vea manchada por la falta de este galardón. Otras ciudades sin depuradora o cuya depuradora vierte directamente a la playa, tienen Bandera Azul, aunque no quiero personalizar en ningún municipio, lo cual resulta incomprensible”.
Páez ha recalcado que “Chiclana ha emprendido una experiencia piloto de instalación de una boya multiparamétrica para analizar posibles incidencias por vertidos en las aguas, precisamente de Sancti Petri. Este proyecto que se encuentra ya en la segunda fase de mediciones nos ofrece total garantía en el caso de que se produjera cualquier incidencia, sin que hasta ahora se haya producido ninguna y sin que las mediciones hayan registrado contaminación alguna”.
Pero no queda ahí rn la innovación de Chiclana en materia tecnológica, ya que ha recordado que “el proyecto All-Gas, que se encuentra en su fase demostrativa, permite depurar el agua de El Torno recuperando el nitrógeno y el fósforo y a su vez logrando productos de interés ecológico como el biogás”.
Para finalizar, el responsable de Playas ha asegurado que “los chiclaneros y visitantes pueden tener la total tranquilidad y completa seguridad de que las aguas de baño de La Barrosa y Sancti Petri son excepcionales. Al margen de lo ya comentado lo atestiguan las cuatro certificaciones más (ISO 14.001, ISO 9.0001, Q de Calidad y Ecoplayas) en las que anualmente aprobamos con nota, como también con la Bandera Azul en La Barrosa que seguimos manteniendo”.