Minutos después de la derrota en Inglaterra contra el Manchester City (4-3), en la primera ocasión que los futbolistas, con el francés Karim Benzema a la cabeza, el técnico Carlo Ancelotti y el director de relaciones institucionales Emilio Butragueño tuvieron para hablar, emplazaron a la afición del Real Madrid a vivir “otra noche mágica” en la vuelta de semifinales de la Liga de Campeones en el Santiago Bernabéu.
“Tenemos que ir al Bernabéu, necesitamos a la afición como nunca y vamos a hacer una cosa mágica que es ganar”, dijo el delantero galo nada más acabar el encuentro.
Y es que el Santiago Bernabéu está siendo un factor clave para explicar la llegada del Real Madrid a las semifinales de ‘Champions’. Tras año y medio sin jugar en su estadio, ya que el conjunto blanco decidió disputar sus partidos de local en el Alfredo di Stéfano, en su Ciudad Deportiva, al no estar permitido el público en las gradas por la pandemia del coronavirus, este no ha tardado en vivir noches para la historia.
La primera fue el 9 de marzo contra el París Saint-Germain. Y seguramente la más especial al tratarse de la visita de Kylian Mbappé, quien pudo llegar al Real Madrid el pasado verano y podría hacerlo en este tras acabar su contrato, y las tensas relaciones entre ambos clubes por la disputa por el delantero y por una Superliga encabezada por Florentino Pérez y a la que se opone rotundamente Nasser Al-Khelaïfi.
La desventaja de la ida (1-0) coincide con la actual frente al Manchester City, al no haber ya valor doble de los goles fuera de casa, pero, aunque con diferentes sensaciones, en ambos encuentros se vio superado el Real Madrid.
En París, por no tirar siquiera a portería, y en Manchester, porque fue el equipo de Guardiola el que tuvo el dominio del juego y perdonó por momentos. Sin embargo, ninguno de los dos pudo traducirlo en un resultado más amplio, y esto ya le pasó factura al PSG.
Tras dejar vivo al Real Madrid hasta el minuto 61, con dos goles de Mbappé anulados por fuera de juego y otro convertido, Karim Benzema anotó tres tantos en 17 minutos y dio la vuelta a la eliminatoria. La presión sobre Donnarumma para provocar el error y dos goles en dos para certificar la remontada a lomos de un Santiago Bernabéu que, como en los días grandes en Europa, llevó en volandas a su equipo.
El ambiente pareció superar a un equipo de estrellas pero que adolecía de ser precisamente eso, un equipo. Todo lo contrario a un Chelsea, verdugo en semifinales del Real Madrid la pasada temporada y a la postre campeón.
También diferente el ambiente. El Real Madrid firmó su mejor partido de la temporada en Londres con un 1-3, pero los de Thomas Tuchel tardaron poco en asustar al Bernabéu. En 75 minutos le dio la vuelta a la eliminatoria, con un gol anulado por mano de Marcos Alonso incluido, pero apareció la magia de nuevo.
Minuto 80 y un centro perfecto de Modric con el exterior para Rodrygo, que había saltado al terreno de juego dos minutos antes, forzó una prórroga en la que Benzema se encargó de dar el pase al Real Madrid. Los de Carlo Ancelotti se vieron superados desde el inicio del encuentro, pero en un giro de guion inexplicable en otro contexto y otro club, se clasificaron para semifinales.
El azar deparó que la vuelta de las semis se disputara también en el Santiago Bernabéu, y ya esto solo es una razón de preocupación en el que será el próximo visitante en ‘Champions’, el Manchester City. Los jugadores madridistas lo saben, y además de Benzema no tardaron en calentar el ambiente.
“Contentos nunca con una derrota, pero tenemos 90 minutos para hacer la diferencia en el Bernabéu. El próximo partido va a ser diferente”, aseguró Vinicius en Movistar+ tras la ida.
Su compatriota Rodrygo hizo lo propio, aunque a través de sus redes sociales: "Nos vemos en el Bernabéu...", escribió.
Un mensaje que, además de con vídeos rememorando los partidos contra PSG y Chelsea, también se manda desde el propio club, como se encargó de hacer Emilio Butragueño, director de relaciones institucionales del Real Madrid: “Queda todo abierto para el Bernabéu y esperamos una noche mágica con el apoyo de nuestro público”, comentó tras caer 4-3 en Manchester.
El próximo miércoles, desde antes de que empiece el partido a las 21:00 horas CEST (-2 GMT) con el recibimiento al autobús hora y media antes, lleva en la mente de los integrantes del Real Madrid desde el pase a las semifinales, y más tras la derrota en la ida.
Tanto es así que en la celebración el pasado sábado de la 35ª Liga ganada por el conjunto blanco, la remontada en ‘Champions’ estuvo muy presente. Incluso el propio Ancelotti se encargó de recordarlo en la fuente de Cibeles ante decenas de miles de aficionados: “¡A por el miércoles!”, gritó el técnico a lo que fue contestado por los seguidores con gritos de “¡sí se puede, sí se puede!”.
Mensaje que se repetirá con insistencia en estos días hasta el partido con el objetivo de que aguarde “otra noche mágica” que le de el pase a la final de París al Real Madrid en su camino a la decimocuarta orejona.
