El ansiado triple-doble que en los últimos partidos había buscado el pívot Pau Gasol al final lo consiguió, acompañado de nueva marca individual en asistencias, que lo dejaron como el mejor jugador español de la jornada de la NBA.
Gasol, que lideró al equipo en todas las facetas del juego, aportó 22 puntos, 16 rebotes y 14 asistencias, pero no pudo evitar la derrota de los Bulls en su cancha (95-103) ante los Trail Blazers de Portland.
El primer triple-doble de la temporada, trigésimo cuarto doble-doble, en lo que va de liga, que consiguió Gasol no bastó a unos Bulls que siguen diezmados por las lesiones del escolta Jimmy Butler y el ala-pívot hispano-montenegrino Nikola Mirotic.
Gasol jugó 37 minutos en los que anotó 9 de 16 tiros de campo y acertó 4 de 5 desde la línea de personal, además de imponer su presencia dentro de la pintura con 13 rebotes defensivos y tres ofensivos.
El jugador de Sant Boi también tuvo su mejor aportación de la temporada en el apartado de las asistencias, recuperó un balón, perdió tres y puso tres tapones.
"Depende de nosotros que continuemos compitiendo y además hacer bien las cosas cuando estemos en el campo", declaró Gasol al concluir el partido, que dejó a los Bulls con la segunda derrota consecutiva después de haber ganado tres seguidos.
"Tenemos que jugar bien cada partido y eso es algo muy importante, decisivo, porque los partidos que restan son todos claves", recordó.
También destacó en el juego individual el base Ricky Rubio y en su caso sí tuvo la compensación de disfrutar del triunfo que los Timberwolves de Minnesota consiguieron a domicilio por 110-112 ante los Pelicans de Nueva Orleans.
Aunque Ruibo fue el único titular de los Timbewolves que no alcanzó la barrera de los 10 tantos, al quedarse con nueve, el base español respondió como el director del juego de los Timberwolves al repartir 10 asistencias.
Rubio jugó 36 minutos en los que anotó 2 de 5 tiros de campo, falló un intento de triple y acertó 5-5 desde a la línea de personal.
El jugador de El Masnou también capturó cuatro rebotes, que fueron todos defensivos, pero no tuvo su mejor control de balón al perderlo cuatro veces.
Mientras que el ala-pívot hispano congoleño Serge Ibaka tuvo una buena labor individual y de equipo, pero al final no pudo evitar la derrota en la prórroga de los Thunder de Oklahoma City por 118-121 ante los imparables Warriors de Golden State.
Ibaka aportó un doble-doble de 15 puntos y 20 rebotes. El internacional español estableció la mejor marca de la temporada en rebotes, disputó 41 minutos, en los que encestó 7 de 12 tiros de campo, 1 de 2 desde la línea de personal, además de entregar una asistencia.
Ibaka también recuperó un balón, perdió otro, puso un tapón y cometió una falta personal, lo que demostró la gran labor que realizó dentro de la pintura en su lucha con los hombres altos de los Warriors.
