Dar la espalda

Publicado: 13/07/2023
Autor

José Luis Martínez

Consultor de comunicación digital y política. Colaborador del grupo Publicaciones del Sur, Andalucía Información y 7TV Andalucía

El Martinete

Apuntes sobre la actualidad política, social y económica desde la visión de la Andalucía joven que camina

VISITAR BLOG
Nadie mejor que este teórico de la comunicación debería conocer el valor de la palabra
“La educación es el arma más poderosa para cambiar el mundo”, dijo Nelson Mandela. De eso poco o nada entendió Francisco Sierra, candidato de Sumar y catedrático de Comunicación de la Universidad de Sevilla, o al menos así lo demostró el pasado martes en el debate electoral de Canal Sur. Cuando la candidata de Vox por Almería, Rocío de Meer, le preguntó sobre la llegada de pateras a las costas españolas, la respuesta del profesor fue, literalmente, dar la espalda.

Sorprende que Sierra no supiera o quisiera responder a “si seguiría colaborando en rescatar a las pateras que traen las mafias a nuestras costas”, como le interpeló la dirigente de Vox. “¿Van a seguir ustedes colaborando con las mafias?”, le insistía la candidata ignorada, que no quiso dejar pasar la fantástica oportunidad de tirar el balón a puerta: "Señor Sierra, lleva todo el debate sin mirarme. ¿Usted no es del partido de las mujeres, el partido feminista? ¿Por qué no me mira a la cara?”.

El profesor se dejó derrotar en la pugna por el relato de la manera más infantil: con su propio silencio. ¡Pues me enfado y no respiro! Como si de la escena de una famosa película de animación se tratara. Estoy convencido de que a Francisco Sierra le sobran argumentos para desmontar una por una todas las falacias sobre la inmigración irregular que rodean a la formación de ultraderecha. No puedo estar más seguro de que donde los de Abascal solo ven mafias, malhechores, vividores de lo público y pequeños delincuentes, el señor Sierra ve auténticos dramas, personas que arriesgan su vida para huir del conflicto, el hambre y la miseria. Él sabe que ningún ser humano pondría jamás a su hijo en una barca hinchable a menos que el agua fuera más segura que la tierra.

Son muchas las ocasiones en las que se ha demostrado fallida la estrategia de ocultar al oponente, de evitar enfrentarse al problema esperando una solución divina. En política por supuesto, pero también en la educación. Estoy seguro de que ningún alumno suyo consiguió aprobar la densa asignatura de Teoría de la Comunicación entregando el examen en blanco.

Yolanda Díaz ha tenido que salir hoy del paso llamando a sus candidatos a “debatir de frente” con Vox tras esta polémica. Porque dar la espalda a alguien por su ideología, por rechazables que puedan ser sus manifestaciones, no es “un gesto de protesta y de malestar” como después justificó. Tampoco un comportamiento aceptable en las reglas del juego democrático. Es un acto de desprecio. Una falta de respeto y de mala educación que da alas a los argumentos del contrario y que le desautoriza a la hora de confrontar ideas con quienes colocan la bandera LGTB en una papelera, los que niegan la existencia de la violencia machista o los que son contrarios a derechos fundamentales como el del aborto. Nadie mejor que este teórico de la comunicación debería conocer el valor de la palabra.

 

© Copyright 2024 Andalucía Información