El precio de la electricidad en el mercado mayorista ha subido este viernes cerca de un 17 % hasta alcanzar los 240,13 euros euros el megavatio hora (MWh), su segundo precio más alto del año, un día de después del comienzo de la ofensiva militar de Rusia sobre Ucrania.
Tras este nuevo aumento, el tercero consecutivo, el precio de la luz será un 30 % superior al del viernes pasado, y multiplica por más de cinco el importe que marcó hace justo un año (45,83 euros).
Además, el precio mayorista volverá a superar la barrera de los 200 euros/MWh, un valor que se ha alcanzado en cerca del 80 % de los días de diciembre, en más del 70 % de los de enero y en el 36 % de los de febrero.
Por franjas horarias, el precio máximo para este viernes se registrará entre las 19:00 y las 20:00, con 300 euros/MWh, mientras que el mínimo será de 153,32 euros/MWh entre las 4:00 y las 5:00 de la mañana.
En los 25 primeros días de febrero, el precio de la electricidad se sitúa de media en 192,44 euros/MWh, un 20 % más barato que el valor de diciembre, el mes más caro de la historia con 239,22 euros/MWh, pero un 73 % superior al precio medio de 2021 (111,4 euros/MWh), el más elevado desde que existen registros.
Los precios del mercado mayorista repercuten directamente en la tarifa regulada o PVPC, a la que están acogidos casi 11 millones de consumidores en España, y sirve de referencia para los otros 17 millones que contratan su suministro en el mercado libre.
Para amortiguar el impacto que el encarecimiento de la electricidad está teniendo en los consumidores, el Gobierno ha prorrogado la rebaja fiscal sobre los impuestos que gravan el recibo de la luz durante el primer cuatrimestre.
La escalada de precios que afecta a gran parte de Europa se debe, entre otros factores, al encarecimiento del gas en los mercados internacionales, que se emplea en las centrales de ciclo combinado y que marca el precio del mercado en la mayoría de las horas, y al aumento del valor de los derechos de emisión de dióxido de carbono (CO2).
El conflicto entre los dos países soviéticos podría provocar en las próximas semanas un encarecimiento aún mayor de los precios de la energía, especialmente del gas, debido al riesgo de que las importaciones rusas hacia Europa se vean frenadas por las sanciones impuestas por la Unión Europea al país presidido por Vladímir Putin.