La Delegación de Educación asegura que al estar en un colegio concertado, no es la Junta la encargada de facilitar el intérprete
Comienza el curso escolar pero no de la misma forma para todos los niños. Natalia sólo cuenta con siete años pero ya se ha topado con las barreras de frente. Cada día acude a su colegio pero no lo hace sola, es sorda y le acompaña una intérprete. Sus padres afrontan el sueldo de esta intérprete ya que ni desde el colegio Buen Pastor, que es concertado, ni desde la Junta se le facilita ningún ayudante.
Mª José Abad, madre de Natalia, protagonizó a finales del curso pasado una manifestación y, por entonces, parecía que había un conato de solución por todas las partes. Sin embargo, aún no se ha producido ninguna reunión. Según la Delegación de Educación de Sevilla, “el caso está cerrado y más que pasado” pero la madre de la niña no piensa lo mismo. “Aún estoy esperando la reunión en la que nos íbamos a reunir todas las partes para poder solucionar la situación. Nosotros no hemos dialogado todavía. Estoy indignada y avergonzada por la situación”.
Educación sostiene que no son los encargados de facilitarle un intérprete porque la niña está escolarizada en un colegio concertado. “La Administración aporta una dotación al colegio y éste es el que tiene que establecer dónde lo emplea. Nosotros no podemos contratar a personal docente en un colegio concertado”, mantiene Educación. El Buen Pastor, a pesar de que Viva Sevilla lo ha intentado, no ha querido ofrecer su versión de los hechos.
“Me dijeron que la cambiara a un público, pero yo no conozco ningún colegio público en el que se contemple un intérprete. No se está aplicando la ley ni en los públicos. En Secundaria sí que Delegación manda un interprete”, mantiene Abad. Sin embargo, si la niña acudiera a un colegio público tampoco garantizan que pudieran facilitarle un intérprete todas las horas, ya que “tendrían que estudiarlo”, según Delegación.