Las instalaciones se utilizaban para las reuniones del 15M en Sevilla
Agentes de la Policía Nacional han procedido este martes a cerrar las instalaciones del antiguo mercado de la Encarnación, que había sido ocupado por miembros el movimiento 15M desde el día 30 de octubre de 2011 y que en el momento de la actuación policial no contaba con ningún miembro del citado movimiento en su interior.
Según ha informado a Europa Press un portavoz del movimiento, a primera hora de la mañana "una veintena" de agentes de la Policía Nacional han acudido al antiguo mercado de la Encarnación para desalojarlo pero, "al encontrarlo sin personas en su interior, han procedido a cerrarlo y han instalado un amplio cordón policial para que no se pueda volver a entrar".
En este sentido, señala que la Policía aún se encuentra en el interior de las instalaciones y que ha identificado a las personas que intentaban acceder al antiguo mercado. Así, el portavoz del movimiento se ha mostrado "preocupado" por lo que pueda ocurrir con el material que se encuentra en el interior, como ordenadores, cámaras o grabadoras, entre otros.
Así, recuerda que las instalaciones se usaban para reuniones de el movimiento 'indignado', con asambleas de gestión, universitarias o feministas, que podían llegar a congregar en ocasiones "hasta unas 70 u 80 personas". Además, añade que estaba previsto para los próximos días un encuentro con los antiguos comerciantes y jornadas universitarias y de análisis de los nuevos proyectos que afectan a la ciudad.
A finales de octubre un grupo de unas 20 personas del movimiento 15M en Sevilla, después de la celebración de una manifestación por el derecho universal a la vivienda por las calles del centro de la capital hispalense, tomaron el antiguo mercado provisional de la Encarnación, situado en la plaza sevillana del mismo nombre.
Además, el movimiento 15M indicó en un comunicado en su momento que "la plaza de 'las setas' de la Encarnación, donde estuvo la acampada y se celebran las asambleas de coordinación del 15M, es ahora mismo propiedad privada y de hecho la compañía propietaria la cierra al público a su antojo", por lo que han ocupado el antiguo mercado bajo el lema 'Si privatizan lo público, tomaremos lo privado'.