El ministro de Economía, Luis de Guindos, ha asegurado que el Gobierno luchará "con todas sus fuerzas" contra el fraude fiscal y ha dicho que la regularización fiscal llevada a cabo el año pasado ha tenido un "dato positivo" que es aflorar una base imponible que a partir de ahora pagará impuestos.
Guindos ha escenificado durante el Ecofin informal de Dublín con sus homólogos de Francia, Alemania, Reino Unido, Polonia e Italia un frente común en el combate contra el secreto bancario. Los seis países han anunciado que pondrán en marcha un proyecto piloto de intercambio de información al que esperan que se sumen el resto de Estados miembros.
"La voluntad del Gobierno español es luchar con todas sus fuerzas contra el fraude fiscal y uno de los instrumentos fundamentales es la cooperación con el resto de países", ha dicho el ministro de Economía a su llegada a la reunión del Ecofin.
"Recientemente ha habido una regularización fiscal que ha tenido un dato positivo que ha aflorado una base imponible que va a pagar impuestos a partir de ahora y ese es un dato fundamental", ha asegurado Guindos.
A su juicio, el acuerdo alcanzado por los seis grandes países de la UE supone "buenas noticias" porque significa que "todo lo que es fraude fiscal, situaciones patrimoniales opacas, sea definitivamente atacado por parte de la Unión".
"El fraude fiscal, si hubiera intercambio automático de información como el que acordamos ayer, sería mucho más difícil", ha insistido el ministro de Economía. Esta medida debe completarse con "una política adecuada en relación con los paraísos fiscales".
"A ese respecto, la decisión de Luxemburgo de intercambiar información es otro paso en la dirección correcta", ha apuntado Guindos. Luxemburgo y Austria son los dos únicos países de la UE que todavía mantienen el secreto bancario, pero el primero ha asegurado que lo levantará en 2015.