El paro continúa siendo el principal problema de España y la corrupción sigue en el segundo lugar de la tabla, si bien la inquietud que genera ésta última ha descendido 16 puntos en los nueve primeros meses de este año, según se desprende del barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) correspondiente al mes de septiembre.
El estudio, hecho público este miércoles, se basa en un total de 2.491 entrevistas personales y domiciliarias realizadas en 256 municipios de 48 provincias entre los días 2 y 12 de septiembre y tiene un margen de error de más/menos 2%.
En concreto, el paro es citado como un problema nacional en el 78,6% de los cuestionarios, bajando dos décimas respecto a julio, y continuando la fase descendente que inició el pasado mes de mayo, cuando su porcentaje de menciones era del 81,5%. Hace un año cosechaba el 75,3% y ahora está en un porcentaje similar al de enero de 2014.
La corrupción y el fraude mantienen la segunda plaza de las inquietudes nacionales, con un 39,5%, anotándose una caída de cuatro puntos respecto al barómetro anterior. Las alusiones a este fenómeno en las encuestas del CIS también ha ido cayendo desde el pasado mes de mayo y, en total, desde enero han descendido 16 puntos.
Se da la circunstancia que la inquietud que generan los dos primeros problemas de España es similar a la que despertaban en enero de 2014, cuando el paro era citado por el 78,5% y la corrupción por el 39,5%.
La tercera preocupación nacional siguen siendo los problemas económicos, con un 25,3% de alusiones, similares a las de julio, y en cuarto lugar en una encuesta realizada en plena precampaña de las elecciones catalanas, repite la clase política, con un 21,7%, subiendo 2,6 puntos. En paralelo, también crece 1,2 puntos la inquietud por el Gobierno y los partidos, que se coloca con un 4,2% y la que surge por los nacionalismos sube un punto hasta el 2,3%.
SANIDAD, PROBLEMAS SOCIALES Y EDUCACIÓN
Aunque baja casi un punto respecto al verano, la sanidad sigue anclada en el quinto puesto de la lista de problemas, con un 10,7%, seguida de los problemas sociales (9,6%) y la educación que, como ocurre cada año con el inicio del curso escolar, suma más menciones y llega al 9,4%.
Además, en septiembre se registró un incremento de la preocupación por la inmigración, coincidiendo con el estallido de la crisis de los refugiados sirios que están llegando a Europa por tierra y mar. El trabajo de campo del sondeo arrancó justo el día que se publicó la fotografía de Aylán, el niño que murió ahogado en una playa turca en su travesía hacia Europa.
En concreto, el porcentaje de alusiones a la inmigración pasó del 2,9% de julio a un 7,7% en septiembre, una cifra que no alcanzaba desde marzo 2013. Tres años antes la inmigración estaba en el 'top cinco' de problemas y llegó a cosechar un 19% de menciones.
La lista de problemas personales que mensualmente elabora del CIS también tiene en la cúspide al paro (44%), al que siguen los problemas económicos (23,8%), la corrupción y el fraude (13,6%), la sanidad (10,3%), la educación (9,1%) y los políticos (8,1%).
En plena precampaña de las catalanas y tres meses de las generales, la situación política era "buena" o "muy buena" para el 3,4% y "mala" o "muy mala" para el 71,4%, un porcentaje 4,3 puntos superior al de julio. Tres de cada diez encuestados sostenían que era peor que un año antes y sólo el 7,4 apreciaba mejoras. Además, hay prácticamente un empate entre los que cree que septiembre de 2016 la coyuntura económica habrá empeorado (17,1%) y los que auguran justo lo contrario (18,1%).
MEJORA LA PERCEPCIÓN DE LA ECONOMÍA
Respecto a la actual coyuntura económica, sólo el 3,5% la califica de "buena" o "muy buena", dos décimas menos que en junio, mientras que para el 65,6% es "mala" o "muy mala". No obstante, la mejoría de la percepción de la situación económica es clara si se comparan los datos con los de finales de 2014, cuando la descalificaba el 82% de los entrevistados.
Para el 20,4% la economía está mejor que en septiembre de 2014, frente al 25% que cree que ha ido a peor. Y, con la vista puesta dentro de 12 meses, el 26,3% confía en que mejore y el 14,6% augura que empeorará. También en estas respuestas se aprecian cambios sustanciales, puesto que, en septiembre de 2013, los que creían que la economía empeoraría en el año siguiente rozaban el 31% y ahora han caído a la mitad.
Por otra parte, sólo el 14,5% de quienes actualmente tienen un empleo ven muy o bastante probable perderlo durante el próximo año, medio punto menos que en julio; aunque también caen un 1,2% (del 78,4% al 77,2%) quienes consideran poco o nada probable esa posibilidad.
Además, hasta el 35,7% de los que hoy están en paro consideran muy o bastante probable encontrar un puesto de trabajo en los próximos meses, si bien este dato se reduce un punto y medio con respecto al último barómetro, a la par que cae un punto el número de desempleados que ven poco o nada probable encontrar un empleo, pasando del 53,8% al 52,8%.
Hay que tener en cuenta, no obstante, que entre los encuestados en septiembre hay un 0,4% más de parados y un 1,3% menos de asalariados que en la encuesta anterior.