Las actividades consideradas no esenciales en el decreto del estado de alarma aprobado el pasado 14 de marzo permanecerán paralizadas del 30 de marzo al 9 de abril, con el fin de reducir aún más la movilidad y el riesgo de infecciones, y tratar de evitar el colapso en las UCI cuando llegue el pico de contagios.
Lo ha comunicado este sábado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una comparecencia desde La Moncloa en la que ha avanzado esta medida para hacer frente a la pandemia de coronavirus que mañana se aprobará en un Consejo de Ministros extraordinario.
Sánchez ha remarcado que todos los trabajadores afectados tendrán un permiso retribuido "recuperable" durante todo el tiempo, recibirán su salario "con normalidad y, cuando pase el periodo de cese de actividad, podrán recuperar las horas "de manera paulatina".
Esta medida, calificada de "extraordinaria dureza", evitará el cierre total de la actividad económica, y con ella se pretende rebajar de forma significativa la movilidad, cortar de manera agresiva las infecciones entre compatriotas, reducir el número de hospitalizaciones y descongestionar las UCI.
A falta de concreción mañana en el Consejo de Ministros extraordinario, las actividades consideradas no esenciales son las que aparecen reflejadas en el decreto del estado de alarma aprobado el pasado 14 de marzo. Más allá de las actividades ya prohibidas, la nueva restricción impedirá, por ejemplo, la actividad industrial en sectores no considerados esenciales para luchar contra la epidemia, o la construcción.
En su comparecencia, el jefe del Ejecutivo ha reclamado a la Unión Europea que ofrezca "unida" una respuesta económica y social frente a la pandemia de coronavirus.
Y ha hecho un llamamiento a la creación de un "gran plan Marshall de recuperación" que apueste por la mutualización de los mecanismos de deuda, a través de lo que ha denominado como "bonos de reconstrucción", para dar una respuesta común y evitar que "cada uno de los países se tenga que endeudar" por separado.
El nuevo paquete de medidas que el Gobierno aprobará mañana llega justo cuando Sanidad advertía este sábado la necesidad de prepararse para afrontar el pico de contagios, que, según el director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, Fernando Simón, podría llegar "a finales de la semana que viene o a principios de la otra".
Simón, que ha indicado que posiblemente el pico de contagios se haya superado en algún territorio, aunque no ha querido precisar cuál, ha apelado a "hacer esfuerzos extra" para reducir las transmisiones de riesgo y evitar así la temida saturación de estas unidades que son las que "van a modular la letalidad de la epidemia".
Actualmente son 4.575 las personas ingresadas en UCI en toda España, más de la mitad de ellas concentradas en Madrid y Cataluña.
En términos generales, las últimas 24 horas ha arrojado un total 72.248 casos positivos de coronavirus, 8.189 nuevos infectados, lo que supone un aumento del 12,8 %, y 5.690 fallecidos, que se incrementan un 17,12 % tras sumar 832 muertos más, unos datos que, según Simón, "apuntan a que los incrementos se van estabilizando paulatinamente".
La Comunidad de Madrid sigue siendo el principal foco de contagio. Este viernes ha registrado 345 muertes más, y el total de fallecidos desde que comenzó la epidemia alcanza las 2.757, casi la mitad de los anotados en toda España.
Por este motivo, y ante el colapso de los crematorios, tanto en los dos públicos de la capital como los 28 privados en toda la región, se han creado dos morgues provisionales: La del Palacio de Hielo de Madrid, al que la UME ha trasladado ya 83 fallecidos, y el único edificio construido en la Ciudad de la Justicia, con capacidad para 200 cadáveres.
No obstante, las empresas funerarias privadas se han visto ya obligadas a trasladar a los difuntos a otras provincias para su incineración. Medidas para afrontar lo que queda por venir, lo más duro según los expertos, y que ya había arrojado una buena noticia en cuanto a la concienciación de la sociedad: En la última semana se habían reducido los accesos a las grandes ciudades en vehículos privados entre un 65 y un 80 %.
También el Gobierno ha aumentado en otros 50 millones la inversión realizada en la compra de material sanitario a China y ya son 628 millones de euros los que de momento ha dedicado a la adquisición de mascarillas, respiradores, equipos de protección o guantes, entre otros productos.
Lo ha anunciado este sábado Patricia Lacruz, directora de Cartera y Farmacia del Ministerio de Sanidad, que ha remarcado también que este fin de semana se repartirán 1,5 millones de mascarillas para pacientes y otras 900.000 para profesionales.
Casi dos semanas después de la activación del estado de alarma algunos ciudadanos que siguen sin ser conscientes de la gravedad de la situación: según la Policía Nacional y la Guardia Civil, se han detenido en las últimas 24 horas en toda España a 91 personas y han tramitado 10.120 denuncias por incumplir las normas del estado de alarma.
Con estos datos ya son 699 los arrestados desde que comenzó este periodo excepcional, con una subida del 12,7%, mientras que el número de sanciones durante todo el período del estado de alarma suman 53.017.