La alcaldesa de Huelva, Pilar Miranda, junto al teniente de alcaldesa de Urbanismo y Medio Ambiente, Felipe Arias; y la teniente de alcaldesa de Servicios Sociales, Familia, Empleo, Vivienda y Desarrollo Económico, Adela de Mora, ha visitado el edificio municipal de la calle Grulla en Marismas del Odiel ante el inicio de las obras de rehabilitación de la fachada para solucionar problemas de seguridad, salubridad y ornato público.
Según ha indicado el Consistorio en una nota de prensa, se trata del bloque de los portales 1 y 3 de la calle Grulla, donde viven 56 familias, aunque como ha señalado la alcaldesa "la actuación beneficia directamente a estas 56 familias que llevan mucho tiempo esperando la rehabilitación, pero también a los vecinos y viandantes de esta calle de Marismas del Odiel".
Asimismo, Pilar Miranda ha insistido en que "el objetivo y motivo principal para ejecutar estas obras es garantizar la seguridad en el espacio público, en las calles de Marismas del Odiel". Para ello, se van a eliminar unas estructuras inestables, con alto riesgo de caída. Se trata del revestimiento de unos forjados y de unas cornisas decorativas, que se van rehabilitar y a tratar con los productos y materiales adecuados para evitar que vuelvan a deteriorarse.
Además, respecto a la salubridad de los vecinos, se limpiará la fachada, eliminando cualquier rastro de humedad y aplicando los tratamientos necesarios para favorecer la transpiración de las paredes, pero impidiendo cualquier transferencia del exterior al interior. También se colocará un vierteaguas que garantice la correcta evacuación de las aguas de lluvia, sin dañar la fachada.
Por último, respecto al ornato público, se repasará toda la fachada, con la pintura adecuada y la intención, no sólo de rehabilitar, sino también de prevenir nuevos daños. La teniente de alcaldesa de Vivienda ha explicado que "se trata de unas viviendas que estaban totalmente abandonadas y que, después de sortear todos los trámites administrativos, arrancan con un plazo de ejecución de tres meses y un presupuesto total de 2,1 millones de euros".
"No ha sido fácil, porque además del trabajo, la gestión y la voluntad, en esta ocasión hemos tenido que pelear también con las inclemencias meteorológicas, porque se trata de unas obras que, de ninguna manera, se pueden llevar a cabo con lluvia", ha aclarado.
De esta forma, ha asegurado que están para "demostrar" que están "al lado de los vecinos, que sus problemas son los nuestros y que por muy complicada que sea la solución, trabajamos con ahínco hasta encontrarla".
