La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Jaén ha impuesto penas de prisión que oscilan entre los seis años y cinco meses y los 13 años y once meses a las cinco personas --identificadas como J.C.S., A.S.A., J.M.S.B., J.J.C.I. y Y.C.P.-- acusadas de participar en el asalto, a punta de pistolas, de un domicilio de la calle Olivo de la capital jiennense cometido en octubre de 2012 cuando su propietario se encontraba en su interior.
En concreto, la sentencia, consultada por Europa Press y fechada el día 29 de este pasado mes de noviembre, impone una condena de seis años de cárcel para cada uno de los cinco encartados por un delito de robo con violencia con agravante de disfraz, así como otra de un año y seis meses de prisión para J.C.S. --condenado en 2011 por un delito de amenazas en el ámbito familiar y otro de conducción bajo los efectos del alcohol-- por un delito de tenencia ilícita de armas.
Igualmente, condena a J.C.S., A.S.A., J.M.S.B. y J.J.C.I, a una pena de cinco meses de cárcel por un delito de estafa continuado en grado de tentativa; a J.J.C.I. y Y.C.P., a otra de un año y seis meses por un delito de receptación, y, finalmente, también condena a otros seis años de prisión a J.C.S. como autor de un segundo robo con violencia, con agravante de disfraz, cometido en una vivienda situada en la carretera Jaén-Valdepeñas.
La sentencia, que es recurrible en casación, considera probado que los acusados J.C.S., A.S.A. y J.M.S.B., "puestos de común acuerdo y con intención de obtener un ilícito beneficio económico", entraron el 27 de octubre de 2012, alrededor de las 20,00 horas, en una vivienda particular de la calle Olivo de Jaén "tras realizar un agujero en la valla de alambre" que la delimita y "romper el cristal de la puerta trasera".
Una vez en el interior, "portando pistolas y con sus caras cubiertas", los procesados presuntamente amenazaron al propietario de la casa, que se encontraba en su interior, y le golpearon en la cara "mientras le exigían que les indicase dónde se encontraba la caja fuerte y la abriera".
Seguidamente, lo trasladaron al sótano de la vivienda, donde se encontraba la caja fuerte, "le tumbaron en el suelo, le taparon la cara y le ataron las piernas" mientras "le proferían diversas amenazas de muerte". Como no pudieron abrirla con la llave y la combinación que les suministró la víctima, los acusados se la llevaron "con su contenido", entre el que figuraba "una pulsera de oro con brillantes, una pitillera de plata, unos gemelos y pisacorbatas chapados en oro, un collar de perlas cultivadas", además de otras joyas, un teléfono inalámbrico, una 'tablet', un ordenador portátil, una tarjeta de crédito y 600 euros en efectivo.
Tras salir de dicha casa, el hijo del acusado identificado como J.C.S., que responde a las siglas J.J.C.I., trasladó en coche a los supuestos autores del asalto "a distintos cajeros automáticos de Jaén para sacar dinero con la tarjeta sustraída", algo que lograron en uno de ellos ubicado en la Avenida de Andalucía, del que extrajeron 300 euros.
La sentencia también cuenta que días después de la comisión del robo, y tras intentar sacar 600 euros de un cajero del municipio jiennense de Torredelcampo, los acusados J.C.S., A.S.A. y J.M.S.B. se reunieron con J.J.C.I., a quien J.C.S. le entregó un anillo que formaba parte del material sustraído, y que éste vendió, mientras que Y.C.P. hizo lo propio en un establecimiento de compraventa de oro con "al menos una cadena y un colgante de oro, que la misma adquirió a sabiendas de su ilícita procedencia".
En total, los daños en la vivienda y joyas sustraídas han sido "pericialmente tasados" en 5.920,80 euros, mientras que a 647,99 euros asciende el importe del resto de efectos sustraídos en un robo cuya víctima no sólo sufrió "lesiones consistentes en herida inciso contusa en región occipital y contusiones y abrasiones faciales", sino que también le han quedado "como secuelas un perjuicio estético ligero y trastornos neuróticos por estrés postraumático".
UN SEGUNDO ROBO
Apenas una semana después de dicho suceso, el 4 de noviembre de 2012, el procesado J.C.S. supuestamente penetró, sobre las 21,20 horas, en una vivienda situada en la carretera Jaén-Valdepeñas tras amenazar con una pistola a su propietario, que se encontraba en el interior y a quien le exigió que "abriese la ventana o lo mataría", para después presuntamente tirarlo al suelo, atarlo de pies y manos y taparle la cabeza con un pantalón, según el relato de la sentencia.
Este segundo robo se saldó con la sustracción de "800 euros en efectivo, diez décimos de la lotería de navidad, cuatro gemelos de oro, dos pasadores de corbata, dos relojes, unos prismáticos de bolsillo, una cámara de fotos, una pluma estilográfica y una navaja", efectos que, junto a los daños causados, han sido "pericialmente tasados en 2.688,89 euros".
Por último, la sentencia añade que en el registro del domicilio de J.C.S., realizado en noviembre de 2012 por orden judicial, fueron intervenidas "una pistola semiautomática accionada por gas comprimido y una pistola semiautomática en perfecto estado de funcionamiento", además de "diversa munición", a pesar de que éste carece de "guía de pertenencia y licencia" para ello.
FALLO
Por todos estos hechos, el tribunal ha condenado a J.C.S. a una pena total de 13 años y once meses de prisión; a A.S.A. y J.M.S.B., a seis años y cinco meses; a J.J.C.I., a siete años y once meses, y a Y.C.P., a siete años y seis meses.
Además, también obliga a J.C.S, A.S.A. y J.M.S.B. a abonar seis euros diarios de multa durante dos meses por una falta de lesiones, y a pagar una indemnización de 7.168,79 euros al propietario de la primera vivienda asaltada por los daños causados y lo sustraído, y de 3.150 euros por las "lesiones y secuelas causadas". Por último, condena a J.C.S. al pago de una indemnización de 3.688,69 euros por los efectos metálicos sustraídos y los daños causados en su vivienda.