Una vez agotado y sin acuerdo el plazo legal de un mes del periodo de consultas del ERE municipal, los trabajadores pasan de ser “seleccionados” o “nominados”, en palabras de la presidenta del comité de empresa, Nieves Calvillo, a “despedidos”. Por ello, a falta de que este lunes se conozca si los nueve funcionarios que han cumplido 65 años o lo cumplen de aquí a finales de diciembre se jubilan voluntariamente -lo cual está por ver- la cifra final de empleados que verían extinguidas su relación laboral con el Ayuntamiento sería de 281 personas. Pero esta no es la única batalla que tienen que librar los sindicatos, pero ya en los juzgados y “haciendo presión en la calle”, la segunda ‘lista negra’ con los nombres de los 90 empleados del grupo de empresas municipales va a salir de un momento a otro y una vez que comience el proceso serán 15 días para todas las empresas municipales, y no un mes (por ser empresas con menos de 50 trabajadores) el tiempo que tengan las secciones sindicales y los representantes legales del Ayuntamiento para llegar a un acuerdo que, a juzgar por la experiencia, se antoja como una auténtica misión imposible.
Hasta el momento, a preguntas de los periodistas sobre los plazos con los que trabaja el Consistorio, de la boca del portavoz del Gobierno municipal, Antonio Saldaña, sólo ha salido que “están trabajando en ello”. No hay que perder de vista que fue la alcaldesa, María José García-Pelayo, la que estimó que serían unos 15 días el tiempo que tardaría en ponerse nombre y apellido de nuevo a otros 90 empleados municipales. Llegados a este punto es más que evidente y mucho que el Gobierno local ha preferido no mezclar camisa de once varas y esperar a culminar el primer ERE para meterse de lleno en el segundo, y no el último -el ERE de Onda Jerez sigue pendiente de materializarse-.
A partir de ahora, el siguiente paso una vez que este lunes se solventen los flecos de los funcionarios que acepten o no jubilarse, el Ayuntamiento deberá remitir el resultado de las negociaciones, en las que el acuerdo nunca estuvo cerca, a la autoridad laboral, es decir, a la Consejería de Empleo de la Junta, cuyo informe a raíz de la reforma laboral no será vinculante, ya que el nuevo marco legal la deja con poco que hacer ahora, a diferencia de lo que ocurrió hace unos años cuando la consejería de la que entonces era titular el socialista jerezano Antonio Fernández echó para atrás el ERTE que tenía previsto aplicar la ex alcaldesa Pilar Sánchez.
Siguiendo con los pasos a dar en este nuevo horizonte que marca el fin del periodo de consultas, a los afectados por el ERE lo único que les falta es esperar ya la carta de despido, que les puede ser notificado hasta el 20 de septiembre, para a partir de ahí comenzar su lucha en los tribunales con la demanda individual. No será la única, una vez que el el lunes a los sindicatos se les informe de que el ERE se ha presentado a la autoridad laboral, habrá 20 días para presentar las demandas colectivas, como explicó la presidenta del comité.
En cuanto al calendario de unas movilizaciones que esta última semana se han trasladado a la mismísima casa de la alcaldesa (las patrullas del 092 por el entorno de Croft son más que habituales) y del portavoz del Gobierno local, los sindicatos han anunciado que se reanudarán este lunes con una concentración a las puertas del Ayuntamiento, si bien los sindicatos no descartan que antes de este día algunos afectados se organicen por su cuenta para hacer ruido contra los despidos.
