Cansados de los “reiterados incumplimientos” de las administraciones, Ministerio de Fomento, Ayuntamiento pero, principalmente, la Junta de Andalucía -quien tiene las competencias- en la rehabilitación integral comprometida por convenio en el año 2009, los vecinos de la barriada de La Constancia han recurrido ahora al Defensor del Pueblo Andaluz, José Maeztu Gregorio de Tejada. En una carta con sello de salida del pasado 2 de agosto, la junta directiva de la asociación vecinal La Fraternidad han expuesto a esta institución la “gravísima situación estructural” que vienen padeciendo los aproximadamente 2.000 vecinos que habitan en estas viviendas “afectadas por grietas en fachadas y techos, filtraciones, deficiencias estructurales graves” que han provocado derrumbamientos, caída de techos y en algún caso incluso “desplome de la vivienda” (el más grave fue el que padeció el propio presidente del colectivo vecinal y su esposa, Francisco Flores).
En este sentido, como denuncian en la misiva, “sólo un verdadero milagro” ha evitado que varias personas murieran en estos derrumbamientos. El último de ellos tuvo lugar en marzo y enlaza precisamente con el último ”incumplimiento” por parte de la Administración andaluza. Se trata del bloque 6, de la calle Lagartijo que, a su vez, es el único de los más diez que, según la promesa del delegado territorial de Fomento y Vivienda de la Junta en Cádiz, Manuel Cárdenas, serán objeto de una rehabilitación integral antes de que acabe el año. Complicado, por no decir imposible, lo ven a estas alturas los residentes, teniendo en cuenta que hasta ahora sólo se ha actuado en uno de ellos y está previsto que el próximo día 18 comiencen las obras en el segundo de los edificios proyectados.
En este caso, el del bloque José Gómez Gallito, otro de los considerados “prioritarios” para albergar las obras con más celeridad que el resto, las nueva familias que habitan en el edificio deberán ser desalojadas, extremo que los afectados tampoco se explican. Se realojarán en casas de familiares, pero ni siquiera confían en que los trabajos se inicien en el plazo.
una reunión en septiembre
En cualquier caso, en septiembre, mantendrán una reunión con Cárdenas, y no descartan adoptar medidas de presión si la rehabilitación sigue en stand by. Para esa fecha también o, lo antes posible, esperan también poder sentarse con Maeztu, al que le pedirán que medie para obligar a cumplir los acuerdos firmados por las administraciones.