Entre ellos, el Superb, recuerda Landaluce, ha sido uno de los que ha recalado en el puerto gibraltareño en una de esas paradas reconocidas como “rutinarias”.
El diputado popular ha anunciado que va a pedir explicaciones en la Comisión de Exteriores del Congreso de los Diputados para conocer qué medidas concretas de control está realizando el Gobierno español para garantizar la inocuidad de las visitas de submarinos a la colonia británica, y cuáles han sido las medidas adoptadas en las anteriores visitas.
En el caso de que se produzca un incidente radioactivo en Gibraltar, prosigue Landaluce, “la experiencia y preparación del personal no es la misma ni por asomo que la de los técnicos destinados en la base de Clyde, en Escocia, con lo que el riesgo se multiplica. Lejos de pretender crear alarma, ningún responsable del Gobierno ha dado garantías de que no haya existido riesgo para la salud en las visitas protagonizadas por sumergibles a Gibraltar, y, por tanto, sería deseable que pudiéramos obtener información al respecto”.
Resulta realmente preocupante, lamenta Landaluce, “el nivel de secretismo que rodean todas las visitas de submarinos a la colonia británica, un secretismo mucho mayor que el que mantiene el Gobierno británico en su territorio”. Por tanto, Landaluce va a reclamar al Gobierno español información sobre los controles que se realizan en cada visita de este tipo de embarcaciones a la colonia, a la vez que va a pedir que el ejecutivo exija informes de cada visita de este tipo.
A pesar de las continuas peticiones registradas en las comisiones parlamentarias de Defensa y Exteriores presentadas en su mayoría por el propio Landaluce, “el Gobierno sigue sin dar respuestas a las mismas”.