El Canijo de Jerez acaba de presentar Constelaciones de Humo, su nuevo trabajo discográfico, marcado por unos aires mucho más maduros, un fuerte mensaje social y el protagonismo de la galaxia y las estrellas como eje inspirador.
“Estoy mucho en contacto con mis fans y las primeras reacciones por el disco han sido increíbles”
‘Constelaciones de humo’ lleva poco más de una semana en el mercado. ¿Cómo ha sido el “parto” de este disco?
–Estoy bastante contento porque es un trabajo de muchos meses y es un disco que se ha trabajado muy bien y nos hemos partido el alma más que en otros discos. Se ha cuidado todo mucho, cada parte. Para mí ha sido un desahogo después de tantos meses y sobre todo estoy viendo mucha acogida en redes sociales. Yo que estoy mucho en contacto con mis fans, las primeras reacciones han sido increíbles, ya me dicen sus temas favoritos, me comentan que este disco es diferente e incluso me dan las gracias por sacar cosas así en los tiempos que corren. La situación no es muy buena y el disco es bastante optimista.
Un disco más maduro e incluso con más mensaje que los anteriores, ¿ha preconcebido esta idea o ha salido de dentro?
–Creo que tiene que ver con la música que escucho todo el día que es mucho rock progresivo.También me gusta mucho la ciencia ficción, influyen mucho las películas que veo, todo me ha inspirado para llegar a componer este disco. Me gusta conectarme con las madrugadas y también como yo digo, conectar con la galaxia y la mejor desconectar con ella es la música. La música bien hecha,la que está hecha con el corazón te eleva. Aunque también con un plato de papas con chocos o una copa de vino se puede conectar con la galaxia.
Dentro del disco está la canción ‘Resplandor’, dedicada a Migué Benítez, ¿qué ha supuesto para usted componer este tema?
–Me he desnudado en ella. Es una canción verdadera, hecha con el corazón. Yo siento que me acompaña, que está conmigo todos los días e incluso sueño con él. Estaba componiendo y me salió una melodía tan trianera que me acordé de él. Tal como me vino, me fue saliendo y decidí dedicársela a él.
En ‘Esto es una ruina’ dice que “vamos directos a la extinción”. ¿Fue un presagio de lo que estaba por venir?
–Era una premonición, pero no hay que ser muy listo para tener esta premonición. Antes de la pandemia estábamos viendo muchas tragedias. Los maltratos, el calentamiento global… es todo, es una critica social a que nos estamos cargando al planeta y a nosotros mismos. También en la canción digo que“nadie puede librarse de nosotros”. La tierra se sacudirá y se repondrá, pero nosotros seguiremos ahí porque bicho malo nunca muere.
¿Con qué canción se queda y por qué?
–Me gusta el disco en general, por eso se llama constelaciones, porque las canciones no se parecen mucho entre sí. Mi preferida es “Un lugar”, la penúltima que dura 7 minutos y es una canción sincera. Habla de mi mismo, de hasta donde quiero llegar para ser feliz y ser libre.
¿Ha ayudado el confinamiento a terminarlo?
–Como ahora no hay muchos conciertos, estamos a piñón las 24 horas con redes sociales y es un buen momento para conectar con los fans. El 12 de diciembre vamos a realizar un concierto en streaming con 4 cámaras, artistas invitados, en un estudio y la gente puede adquirir su entrada por 13€y hay opción VIP o meet streaming. Es un rollo porque no nos vemos en persona, pero es una bonita manera de quitarnos las telarañas y buscar otras alternativas. Hay que ir dándole vueltas a este tipo de eventos para que la cultura salga adelante. Muchos vivimos de esto y hay que poner un precio a la cultura y a la música y nos tenemos que reactivar y hacer más eventos así ya sean conciertos en streaming o con medidas de seguridad. Yo mismo he tocado este verano con las medidas de seguridad y ha estado bien. Si esto va para largo, habrá que adaptarse.
La cultura vive un tiempo complicado, ¿cómo es sacar disco en medio de una crisis?
–Yo creo que la música tiene que estar ahí siempre, es lo que nos mantiene unido, nos conecta, nos evade, es necesaria para todo y a mi me ha acompañado desde que nací y no puedo hacer otra cosa, es como mejor me lo paso. Si el publico la escucha, soy el más afortunado del mundo, la manera en la que me escuchen no me importa. Los artistas ya no vendemos discos y sacarlos es lo comido por lo servido, no llena mucho la nevera, la llenan los conciertos.
Y al no haber conciertos, no hay nevera llena…
–Claro, yo estoy notando mucho la crisis, pero gracias al trabajo y esfuerzo que llevo haciendo todos estos años atrás y a que tengo una carrera con canciones que me dan derechos de autor, dinero guardado de otras giras… puedo tirar para delante de momento, pero no pasa nada, hay que pelear día a día y ser positivos. Me preocupa más la situación de mis músicos o mis técnicos que están parados y les cuesta llegar a fin de mes.
Al igual que su disco, terminamos por Jerez, ¿qué significa Jerez para el Canijo?
–Imagínate… es mi tierra, donde nací, mi manera de conectarme con lo que soy. Estoy orgulloso de ser de aquí y mis artistas favoritos son de Jerez, desde Tomasito hasta La Paquera pasando por muchísimos artistas que hacen que me inspire y tenga cada vez más ganas de ir a mi tierra a empaparme de ese arte.
