Nuevo capítulo en la salida de Juan Carlos Maldonado de Ciudadanos (Cs) y de la Diputación de Málaga. La formación naranja presentó este pasado 28 de diciembre un nuevo escrito en la institución provincial en el que solicita que, en aplicación del acuerdo sobre transfuguismo, se curse la baja en el Grupo de Ciudadanos en la Diputación de su exportavoz, quien, por tanto, pasará a la categoría de no adscrito.
Esto supone, según el escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, "la consiguiente pérdida de derechos políticos y económicos" de Juan Carlos Maldonado, que el pasado 22 de noviembre anunció en sus redes sociales que dejaba la formación naranja, criticando que desde esta habían "ninguneado" su labor "e intentado boicotear" su trabajo y el de su equipo.
Pero desde el 22 de noviembre a hoy se han sucedido una serie de escritos en la institución provincial por parte tanto de Maldonado como de Ciudadanos. El primero presentó una declaración responsable, con fecha de 17 de diciembre de 2021, en la que indicaba: "A día de la fecha (...) no he presentado ningún escrito solicitando la baja de mi afiliación al partido político en el que vengo militando desde el año 2015, Ciudadanos-Partido de la Ciudadanía, en ninguna de sus sedes físicas ni electrónica". Una igual presentó en el Ayuntamiento de Mijas.
Desde Ciudadanos, un día antes, se presentó un escrito a la Diputación en el que se indicaba "que se tenga por desistido al partido Ciudadanos (...) de la solicitud que presentó por escrito de 23 de noviembre de 2021 por la que se solicitaba que "proceda a cursar la baja en el Grupo de Ciudadanos en la Diputación, pasando a la categoría de diputado no adscrito con la consiguiente pérdida de derechos políticos y económicos" a Juan Carlos Maldonado "y por consiguiente acepte de plano el presente desistimiento y declare concluso el procedimiento".
Según han explicado fuentes de Ciudadanos a Europa Press, la baja de Maldonado se empieza a tramitar en el mismo momento que él, públicamente, anuncia que abandona el partido. Sin embargo, en este proceso, hay que poner en marcha la liquidación de los trabajadores del grupo provincial, lo que lleva un tiempo, de ahí que al primer escrito de la formación naranja en la institución le siguiera un segundo pidiendo que se paralizara la salida de Maldonado.
"Hay que liquidar los contratos de los trabajadores del grupo provincial y esto lleva un tiempo. El secretario de la Diputación solicitó al partido un escrito en el que se dijera si había causado baja o no pero para cerrar correctamente todo se envió un segundo escrito para ganar tiempo y hacer las cosas para no perjudicar a esos trabajadores del grupo", han aclarado.
Por tanto, una vez que se ha hecho la liquidación de estos trabajadores, el partido presenta este escrito con fecha de 28 de diciembre para cerrar todo el proceso.
En él, la secretaria general de Ciudadanos, Marina Sobrino, solicita que se dé de baja a Juan Carlos Maldonado, quien pasará al grupo de no adscritos. Este documento, según fuentes de la Diputación, tendrá que ser analizado por el secretario de la institución; de hecho, en el pleno de este jueves, de aprobación del presupuesto para 2022, el diputado provincial ha votado bajo las siglas de Ciudadanos.
Este último paso dado por Ciudadanos supone que la formación naranja se queda sin representación en la Diputación de Málaga. Además de la vertiente política, esta salida tiene una parte también económica puesto que el grupo naranja recibe anualmente de la institución provincial una asignación de 252.600 euros para su funcionamiento interno, cantidad que dejará de percibir al no existir ya como grupo. Maldonado, por su parte, disminuirá su retribución, a la espera de saber si tendrá dedicación parcial o exclusiva.
En las pasadas elecciones municipales de 2019, Ciudadanos obtuvo dos representantes en la Diputación de Málaga: Juan Carlos Maldonado, concejal en Mijas; y Juan Cassá, edil en Málaga capital. Este último anunció su baja del partido en mayo de 2020, pasando al grupo de no adscritos, al que ahora se unirá su excompañero de formación.
No obstante, el papel de Cassá, actualmente, es distinto, puesto que apoya al equipo de gobierno del PP y, de hecho, es el responsable de Relaciones Institucionales de la Diputación de Málaga y continúa como portavoz del gobierno.