El Centro Pompidou de Málaga, que abrirá sus puertas el 28 de marzo, pretende "traducir al andaluz" la filosofía del Centro Nacional de Arte y Cultura George Pompidou de París y traer a España su "formidable experiencia" así como hacer que gente joven y quienes habitualmente no tienen acceso al arte se acerquen a él.
Así lo han explicado el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, y el director general del Centre George Pompidou de la capital francesa, Denis Berthomier, en la presentación del espacio malagueño en la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Madrid (ARCO) 2015. Acompañados del embajador de Francia en España, Jerôme Bonnafont, han coincidido en apuntar que el nuevo espacio malagueño será un gran centro expositivo pero también "de actividades complementarias y multidisciplinar, en la línea del Pompidou" francés.
Ambos han insistido en la relevancia que tendrán las actividades paralelas y de mediación y que se programan con el objetivo de "ayudar al publico a que conozca las obras" pero, no solo a los turistas o a quienes acuden a Málaga atraídos por su actividad cultural sino, especialmente, a "la gente que no tiene acceso o conocimiento del arte" y al "público joven, de universidades y escuelas; a cualquier que esté interesado", ha dicho Berthomier.
Esas actividades se van traducir en un enriquecimiento de la vida cultural de Málaga y de toda Andalucía", ha dicho el alcalde que, junto al responsable del centro parisino, ha recordado que la exposición permanente contará con un centenar de obras de "los mejores artistas contemporáneos", como Picasso, Frida Kahlo, Francis Bacon, Max Ernst, René Magritte, Rineke Dijkstra o Marc Chagall, entre otros.
Esa colección semipermanente, que también se renovará cada dos o tres años, se estructurará en torno a cinco temas, como la metamorfosis o el autorretrato, y se acompaña de las muestras temporales, que como ha recordado Berthomier arrancarán con una de Miró, que estará abierta al público hasta el mes de septiembre y en la que "puede ser que haya algo de Picasso".
El contenido de esas exposiciones temporales será definido fundamentalmente por el centro de París, han explicado De la Torre y Berthomier. Éste ha añadido que no habrá presencia permanente del equipo del Pompidou francés en Málaga, pese a que en estos meses previos sí hay esa continuidad. "No va a haber gente de París de forma permanente, serán los responsables de la agencia pública Casa Natal de Picasso, con José María Luna", ha dicho.
El director del centro francés también se ha referido al conjunto de espectáculos programados, entre ellos, 'Cuerpos Simples', con la proyección de películas de videodanza, y a "sorpresas" como la intervención que el francés Daniel Buren realizará en El Cubo de El Puerto de Málaga y que pondrá de manifiesto la "grandeza de la luz de Málaga". "Creará un efecto de luz que se apreciará desde el interior y el exterior, estará lista para antes de la apertura y tendrá carácter permanente", ha resumido Berthomier.
Por otra parte, en la presentación en la feria madrileña, Berthomier también ha señalado que "puede" que los próximos años haya otros centros Pompidou "que no estén excesivamente lejos de aquí". Sin embargo, después se ha limitado a señalar que en Málaga se van a probar "algunos modelos" que pude que se implanten en otras zonas de Europa, pero ha especificado que "por el momento no son proyectos".
ATRACTIVO TURÍSTICO
Por otro lado, De la Torre ha incidido en que el Centro Pompidou servirá para que Málaga impulse su potencial cultural y como ciudad del conocimiento y, además, seguir creciendo en turismo. No en vano, en los últimos años los viajeros que han llegado a la ciudad y se han alojado en hoteles han aumentado un 127 por ciento.
Por su parte, el embajador francés en España ha subrayado que Francia tiene "una vinculación muy fuerte con el arte moderno de España y ha visto también una retroalimentación en los "millones de turistas que llegan a Málaga de todo el mundo": "Es una manera de decirles hay otro Pompidou en Paris e invitarles a que vayan".
Bonnafont ha confiado en que el proyecto no se limite a los cinco años acordados por el momento sino que "sea, como mínimo, para 50" y ha defendido que "en tiempo de crisis la cultura no puede ser victima de los recortes" porque "la cultura es uno de los temas que nos da a los europeos una ventaja en la globalización y una fuerza de atracción en el mundo del siglo XXI".