Los artistas callejeros en Málaga siguen en el limbo jurídico, a merced de las multas a las que se enfrentan si se atreven a tocar en la vía pública. Y a riesgo de quedarse sin instrumentos, su medio de vida para muchos. Todo, pese a que hace más de un año se aprobó en pleno, con el beneplácito del equipo de Gobierno popular, regular esta actividad, que sigue siendo la gran cuenta pendiente de la capital, "pese a que se vende como ciudad donde habita el arte”, lamentó el edil no adscrito, Juanjo Espinosa, que volverá a llevar esta reivindicación a pleno.
La fuga de talento por falta de oportunidades en su ciudad natal o la persecución que sufren por no contar, como en otras ciudades europeas, con puntos donde dar rienda suelta a la creatividad es una constante entre el colectivo de artistas, que reclama dignificar al gremio para hacer gala de la marca turística que vendemos fuera de nuestras fronteras. Junto a esto, también siguen echando en falta hacer realidad la prometida mesa por la cultura en Málaga que contaría con artistas de la ciudad.
En febrero pasado el Ayuntamiento de Málaga ya esbozó el mapa de los artistas callejeros, que contemplaba los puntos donde se les permitiría tocar o actuar mediante un carnet de autorización. Una iniciativa consensuada ya con los vecinos, que siguen esperando que se haga realidad y que volverá a ser protagonista de la sesión plenaria la próxima semana.