El Ayuntamiento de Marbella, a través de la delegación municipal de Derechos Sociales, va a dar un nuevo impulso al Banco del Tiempo, que actualmente cuenta con un total de 353 usuarios que intercambian de forma gratuita tiempo y servicios con el tiempo como unidad de valor.
La concejala responsable del área, Victoria Morales, ha explicado que se está realizando un trabajo de actualización de los datos, para depurar el registro, así como la oferta y demandas existentes, al tiempo que ha hecho un llamamiento a los ciudadanos a participar en esta red.
“El Banco del Tiempo fomenta la reconstrucción de las comunidades y promueve que las personas se conviertan en verdaderos ciudadanos activos”, ha subrayado la edil, quien ha destacado que “ayuda a romper el aislamiento y la soledad urbana, crea espacios para compartir, acercar a las personas y desarrollar en la práctica valores de cooperación y solidaridad y mejorando la calida de vida de las personas”.
Esta experiencia que se viene desarrollando desde hace algunos años en diferentes lugares del mundo, se puso en marcha en Marbella en febrero de 2011. Se trata de un sistema de intercambios donde poder ofrecer y recibir servicios. Todas las actividades y servicios se valoran de la misma manera, cuantificadas en tiempo como unidad de valor.
Las personas que quieran participar deben inscribirse en el registro y aceptar las condiciones expresas para este sistema. Posteriormente, mantendrán una entrevista con el agente del tiempo, en el que se determinará qué servicios ofrece y cuáles demanda, y se les explicará la normativa y el funcionamiento.
Una vez inscritas, se les hace entrega de un talonario de tiempo que utiliza en el momento que solicita tiempo de otra persona para algún servicio concreto que necesite e informará a la Secretaría del Banco del Tiempo, que anota estos intercambios y actualiza el saldo de la cuenta corriente de los socios.
La Secretaría se encarga además de enviar periódicamente a cada socio el estado de su cuenta corriente de tiempo, junto al boletín de los servicios que puede intercambiar y que se van actualizando en función de los nuevos socios. Además de las actividades individuales, se desarrollan ocasionalmente talleres.
Los Bancos del Tiempo fueron concebidos inicialmente como un proyecto de género, es decir, de apoyo exclusivo a las mujeres (culturalmente destinadas a ser cuidadoras) con el objetivo de que pudieran obtener más tiempo libre gracias a la red de solidaridad. Actualmente han tomado una orientación más territorial y abierta al conjunto de la población.