Según Anngu, aún no se ha determinado quienes son los autores del ataque ni sus motivos
Al menos 24 personas murieron el sábado en un ataque perpetrado por hombres armados contra dos aldeas del estado de Benue, en el centro de Nigeria, confirmó hoy a EFE una organización de la sociedad civil.
Ongu Anngu, presidente del Congreso de la Juventud de Benue (BYC, por sus siglas en inglés), dijo que un gran número de hombres armados irrumpieron a primera hora de ayer en las aldeas de Zaki Apouma y Diom, pertenecientes al área de gobierno local de Ukum.
"Eran en torno a unos 30, entraron en las dos comunidades disparando y mataron a 24 de los nuestros. Hemos recuperado los cuerpos de algunas víctimas y se está intentando la recuperación de más cuerpos", dijo a EFE por teléfono.
Anngu explicó que los atacantes también incendiaron varias casas y destruyeron campos de cultivo.
Según Anngu, aún no se ha determinado quienes son los autores del ataque ni sus motivos.
"Últimamente, el estado se ha convertido en un campo de exterminio y muchos inocentes han muerto prematuramente a manos de estos agresores", añadió.
Catherine Anene, portavoz de la Policía del estado de Benue, también confirmó el incidente provocado por "una banda de milicianos" a última hora de ayer, pero dijo que sólo se habían recuperado ocho cadáveres tras el ataque y que "otras muchas personas heridas fueron trasladadas al hospital".
"Tras recibir esta información, los equipos policiales, en colaboración con otras agencias de seguridad, se enfrentaron a estos bandidos, que finalmente fueron repelidos", declaró a la prensa al asegurar que "la operación continúa en la zona".
Algunos estados nigerianos -sobre todo del centro y noroeste del país- sufren ataques incesantes por parte de "bandidos", término usado en el país para nombrar a las bandas criminales que cometen asaltos y secuestros masivos para lograr cuantiosos rescates.
Benue, uno de los principales productores de alimentos de Nigeria, ha registrado en los últimos años casos de violencia entre los agricultores locales, predominantemente cristianos, y los pastores fulanis, de origen musulmán, por la escasez de tierra y recursos.
A esta inseguridad se suma la ocasionada desde 2009 por la actividad del grupo yihadista Boko Haram en el noreste del país y, a partir de 2016, también de su escisión, el Estado Islámico en la Provincia de África Occidental (ISWAP, por sus siglas inglés).