El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha cifrado este viernes el tres millones el número de sirios inscritos como refugiados, en medio del recrudecimiento del conflicto en el interior del país.
"Casi la mitad de los sirios se han visto forzados a abandonar sus hogares y huir para salvar sus vidas. Uno de cada ocho ha cruzado la frontera, lo que supone un millón más que hace un año. Otros 6,5 millones de personas son desplazados internos. La mitad de ellos son niños", ha dicho ACNUR a través de un comunicado.
"Hay signos preocupantes de que el viaje para salir de Siria está siendo cada vez más duro, con mucha gente forzada a pagar sobornos en los puestos de control armados que proliferan cerca de las fronteras", ha detallado.
"Los refugiados que cruzan el desierto para llegar al este de Jordania se están viendo forzados a pagar a los contrabandistas sumas de cien dólares o más por cabeza para que les lleven a lugar seguro", ha agregado ACNUR.
Al deterioro de la situación de seguridad, los últimos refugiados inscritos en la agencia han citado una creciente dificultad para encontrar trabajo, el incremento drástico de los precios de la comida y los productos básicos y la carencia de servicios.
Además, un número creciente de los refugiados que huyen del país sufren enfermedades como la diabetes, cáncer o enfermedades coronarias, viéndose forzados a abandonar Siria debido a que no pueden recibir atención adecuada.
IMPACTO EN LOS PAÍSES VECINOS
Por otra parte, la agencia de Naciones Unidas ha afirmado que la mayoría de los refugiados se encuentran en los países vecinos, siendo Líbano el principal destino con 1.140.000 refugiados sirios en su territorio. Además, 815.000 refugiados se han inscrito en Turquía, mientras que otras 608.000 lo han hecho en Jordania.
ACNUR ha sostenido que esta situación "ha significado una gran carga en las economías, infraestructuras y recursos" de estos países, y ha explicado que "más de cuatro de cada cinco refugiados luchan para conseguir cubrir sus necesidades básicas en los centros urbanos, de los que el 38 por ciento viven por debajo de los estándares mínimos.
"Los sirios son ahora la población de refugiados bajo cuidado de ACNUR más grande del mundo, sólo superados en número por las décadas de conflicto en Palestina. La operación en Siria es la más grande en los 64 años de historia de ACNUR", ha explicado.
El alto comisionado de ACNUR, António Guterres, ha dicho que la crisis "se ha convertido en la mayor emergencia humanitaria de nuestra era, pese a lo que el mundo está fracasando a la hora de satisfacer las necesidades de los refugiados y de los países que les acogen".
Así, ha recalcado que, pese a que la respuesta a la crisis en Siria ha sido generosa, "la amarga realidad es que se queda muy corta respecto a las necesidades existentes".
Los donantes han entregado 4.100 millones de dólares (cerca de 3.100 millones de euros) desde 2012, pese a lo que se necesitan otros 2.000 millones de dólares (alrededor de 1.520 millones de euros) antes de que termine este año.
Durante el año pasado, 1,7 millones de refugiados recibieron alimentos, 350.000 niños fueron inscritos en escuelas y se facilitaron alojamientos en campamentos para 400.000 refugiados.
Por otra parte, ACNUR ha expresado su profunda preocupación por el bienestar de cientos de sirios que se encuentran atrapados en el interior del campamento de refugiados de Al Obaidi, ubicado en la localidad iraquí de Al Qaim, después de que las agencias de la ONU y las ONG internacionales se hayan visto forzadas a abandonar la zona.