Chaves se ha comprometido Montilla a que la financiación autonómica esté resuelta en mayo con un nuevo modelo en el que Cataluña no recibirá, como ocurre ahora, por debajo de la media española.
Montilla se reunió en el Palau de la Generalitat con Chaves, en la primera visita del vicepresidente tercero a una comunidad autónoma, en un encuentro que se inició pasadas las doce del mediodía y que se prologó con un almuerzo privado en la Casa dels Canonges, la residencia oficial del presidente de Cataluña.
En la rueda de prensa posterior, en la que escenografía sirvió para remarcar la relación bilateral entre Cataluña y España, Chaves y Montilla pactaron así dejar atrás las diferencias del último año entre la Generalitat y el Estado, y como muestra de esta buena predisposición el vicepresidente aseguró que el Gobierno aportará más de 8.000 millones al futuro sistema de financiación autonómica.
El presidente catalán subrayó que la reunión marca un “punto de inflexión” en la relación con el Gobierno, por la disposición del Ejecutivo español a resolver la financiación, y confió en que este “cambio de tendencia” se concrete “en las próximas semanas”, en todo caso “antes del verano”.
Por su parte, Chaves destacó que tiene el encargo del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, de “dar un impulso” a la relación entre ambos gobiernos, que admitió que se ha “enturbiado” en el último año por el “problema nuclear” de la financiación.
En este sentido, ambos expresaron su confianza en que la reunión que mantendrán mañana la vicepresidenta Elena Salgado y el conseller de Economía de la Generalitat, Antoni Castells, servirá para avanzar en un acuerdo.
Un pacto que Chaves, que rechazó avanzar cifras concretas, admitió que primero deberían sellar de forma bilateral la Generalitat y el Estado.