Cuatro palestinos, ente ellos un menor, murieron este viernes en nuevas protestas en Gaza junto a la línea divisoria con Israel, según indicaron fuentes del Ministerio de Sanidad de la franja, controlada por el movimiento islamista palestino Hamás.
Por undécimo viernes consecutivo, que además coincidió con el último del mes sagrado musulmán de Ramadán, miles de personas (unas 10.000, según los organizadores) volvieron a congregarse ante la verja que separa Gaza de Israel, una acción que, según dijeron a Efe algunos de los convocantes, piensan continuar.
Los manifestantes comenzaron a congregarse hacia las 11.00 GMT en la zona delimitada por la valla de separación, tras la que los soldados israelíes comenzaron a disparar gran cantidad de botes de humo para impedir que siguieran acercándose.
Un total de 56 personas resultaron heridas por impacto de los botes de humo, según indicó el ministerio de Sanidad de Gaza.
Los choques se incrementaron durante la tarde, cuando se produjeron los cuatro fallecidos y otras 117 personas resultaron heridas, informó el portavoz del ministerio de Sanidad palestino, Ashraf al Qedra.
El fotógrafo de la agencia francesa AFP Mohamed al Baba recibió un disparo en la pierna derecha, y un camarógrafo de la televisión Al Aqsa (vinculada a Hamás) resultó herido de carácter reservado por el impacto de un bote de humo.
Miles de personas de todas las edades permanecían de pie frente a la frontera, mientras que grupos de jóvenes quemaban neumáticos, que traían en motocarros, y otros fabricaban cometas con botes y telas ardiendo que lanzaron hacia la parte israelí, cuyas tropas respondieron con abundante material antidisturbios, según pudo comprobar Efe.
El Ejército israelí, que había reforzado los efectivos ante esta convocatoria al haberse hecho coincidir con los que los árabes denominan la "naksa" (el "contratiempo" en árabe), con el que conmemoran la Guerra de los seis días, en 1967, que supuso el inicio de la ocupación israelí.
"En las ultimas horas, terroristas lanzaron decenas de cometas y globos con artefactos explosivos sobre la verja. Los objetos explotaron en el aire", se indica en un comunicado militar israelí.
"Además, se lanzaron varios artefactos explosivos y una granada y se quemaron neumáticos cerca de la verja de seguridad. Las tropas están respondiendo con medios antidisturbios y operan de acuerdo con las normas", señaló la nota.
La movilización, denominada hoy como Marcha del Millón a Jerusalén, en conmemoración del 51 aniversario de la ocupación por Israel de la parte oriental de la ciudad, durante la Guerra de los seis días, forma parte de la llamada Gran Marcha del Retorno, que comenzó el pasado 30 de marzo, y reclama el derecho al retorno de los refugiados palestinos.
Israel considera que Hamás, que apoya institucionalmente las manifestaciones, las utiliza para dañar la valla de seguridad y cometer atentados.
El líder de Hamás, Ismael Haniye, participó hoy en la convocatoria en Malaka, al este de la ciudad de Gaza.
Para el activista Ahmed Abu Artema, pionero en organizar estas protestas, "no hay otra opción que continuar".
"La propaganda israelí pretende hacer olvidar a la gente que el mayor problema que hay es el bloqueo, y no es Hamás quien está sitiado, sino la gente", dijo a Efe Abu Artema.
Las marchas han dejado hasta el momento 124 muertos, la mayoría en las protestas de los viernes, además de en incidentes violentos, y más de 3.000 heridos de bala, pero Abu Artema cree que siguen teniendo apoyo.
"Si paramos estas marchas, ¿qué tenemos? ¿quedarnos callados? Lo que ocurre en Gaza no lo podemos describir como vida", subrayó.