El Gobierno británico ha impuesto este viernes nuevas restricciones selectivas en buena parte del norte de Inglaterra que impiden a los ciudadanos visitar a otras personas en sus hogares, ante un rebrote del coronavirus.
En declaraciones a la BBC, el ministro de Sanidad, Matt Hancock, ha defendido las medidas, que entraron en vigor sin apenas preaviso la pasada medianoche, al señalar que, según los datos de rastreo de contagios, la mayor parte de la transmisión del virus se produce "entre hogares que se visitan entre sí y gente que visita a parientes y amigos".
La directriz significa que los habitantes de ciudades como Manchester y su área metropolitana y los condados de East Lancashire y parte de West Yorkshire no podrán encontrarse en las casas de unos y otros ni en sus jardines, pero cada hogar sí podrá ir al "pub" o a restaurantes siempre que no se mezcle con otro grupo de personas.
Hancock reconoció que la medida supone un golpe para la comunidad musulmana, que se preparaba para celebrar en familia la festividad de Eid al-Adha este fin de semana.
El líder de la oposición laborista, Keir Starmer, calificó de nuevo "punto bajo en la comunicación en esta crisis" que el Gobierno conservador del primer ministro, Boris Johnson, anunciara en Twitter poco antes de su entrada en vigor "restricciones que potencialmente afectan a millones de personas".
Junto con la iniciativa en el norte inglés, se mantienen un buen número de restricciones, incluidas las visitas entre hogares, en la ciudad de Leicester, en el centro de Inglaterra, que está sometida a un confinamiento selectivo desde hace un mes.
En el resto de Inglaterra y los territorios de Irlanda del Norte, Escocia y Gales se mantiene el desconfinamiento gradual, si bien el Gobierno alerta de que hay que estar atentos porque se percibe un segundo brote del virus en Europa.
Esto ha llevado al Ejecutivo de Johnson a imponer una cuarentena a los viajeros llegados desde España, ante el repunte del virus en algunas zonas de ese país, y no descarta hacer lo mismo con otros territorios.
En el Reino Unido, las muertes por la COVID-19 se elevaron el jueves a 45.999, tras sumar 38 en 24 horas, con 846 nuevos contagios, el mayor número diario en un mes.