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Provincia de Granada

Absuelven a un acusado de violar a una joven hace siete años por falta de indicios suficientes

La Fiscalía pedía para el acusado de esta agresión una pena de nueve años de prisión por un delito de violación, pero la sala entiende que los indicios existentes contra él "no reúnen los requisitos" para poder afirmar "sin género de dudas" que fue el autor de la agresión"

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La Sección Primera de la Audiencia Provincial de Granada ha absuelto a un hombre de 30 años acusado de agresión sexual contra una joven hace ya más de siete años en Granada capital al entender que no existen indicios suficientes para condenarlo, pese a que los jueces admiten que su coartada "no es verosímil".

   Los magistrados consideran probado en su sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, que sobre las 6,30 horas del 22 de diciembre de 2005 un varón "no identificado" se acercó a la joven, de 23 años, cuando ésta se encontraba en los jardines de acceso a su vivienda y la tapó la boca diciéndole: "Estate quieta, si te estás quieta no te va a pasar nada". Acto seguido, la tiró al suelo y comenzó a tocarla e intentar violarla.

   La Fiscalía pedía para el acusado de esta agresión una pena de nueve años de prisión por un delito de violación, pero la sala entiende que los indicios existentes contra él "no reúnen los requisitos" para poder afirmar "sin género de dudas" que fue el autor de la agresión, pese a que su coartada "no es verosímil".

   Según señalan en el fallo, los indicios que han quedado acreditados en este caso es que el guante que quedó pegado mediante velcro en el abrigo de la chica pertenecía a su agresor, "pues no hay otra explicación racional" para que llegase hasta la parte delantera de esa prenda.

   De ese guante se obtuvo el perfil genético del enjuiciado por esta agresión, pero también el de otro varón no identificado, según el informe pericial, y las características físicas ofrecidas por denunciante coincidían con las del acusado "pero son muy generales".

   Por ello, el tribunal estima que, aunque la coartada del acusado "no es verosímil", puesto que no recordaba que había pasado aquella noche en casa de sus padres con la que después sería su esposa, los indicios existentes contra él no reúnen los requisitos necesarios "para poder afirmar, sin género alguno de dudas, que fue el autor de la agresión sufrida" por la chica.

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