El abogado que representa a los sacerdotes que fueron denunciados por abusos sexuales a menores se ha congratulado este lunes de que el Juzgado de Instrucción 4 de Granada, que investiga el caso, haya declarado prescritos todos los delitos que se le atribuían a los imputados, excepto uno de ellos, pero ha considerad que esta decisión debería haber sido adoptada "antes" teniendo en cuenta la trascendencia mediática que ha tenido este asunto.
En declaraciones a Europa Press, el letrado, Javier Muriel, ha mantenido además que el único imputado que deja el juez, el padre Román M.V.C., considerado el líder del llamado grupo de 'Los Romanones', sigue manteniendo su inocencia "sin género de duda".
"Los hechos denunciados ya eran conocidos por las fuerzas investigadoras hace tiempo y debería haberse adoptado esta prescripción con bastante antelación", ha considerado el abogado, que se ha alegrado de que el fiscal del caso y el juez hayan compartido su postura sobre la prescripción, como ya hizo constar en su escrito de alegaciones enviado al Juzgado hace unos días.
En lo que respecta a un posible recurso, en tanto que las actuaciones continuarán contra uno de sus clientes, ha indicado que aún tiene que estudiar el contenido del auto en su totalidad para tomar una decisión al respecto.
El abogado del primer denunciante, que llegó a llevar su caso ante el Papa Francisco, el letrado Jorge Aguilera, también ha dicho a Europa Press que aún no ha podido estudiar en profundidad la resolución, aunque ha avanzado que, una vez que hable con su cliente, "casi con toda seguridad" planteará un recurso en el plazo establecido por el magistrado Antonio Moreno, de tres días para recurso de reforma y de cinco para apelación.
Por su parte, la Asociación Pro Derechos del Niño (Prodeni), personada como acusación popular en el caso, tiene igualmente que analizar el auto, aunque ya ha anunciado que si hay posibilidad de recurso "se hará todo lo posible por recurrirlo". Así lo ha indicado a Europa Press el presidente de Prodeni, Juan Pedro Oliver, que ha recordado que la asociación tiene "una opinión distinta" sobre la prescripción, y pretende llevar esa opinión "hasta el final", porque considera que es lo "justo y lo correcto".
El caso se hizo público el pasado mes de noviembre, cuando fueron detenidos el padre Román, dos sacerdotes más y un profesor de Religión, que sin embargo quedaron después en libertad con cargos, en un caso en el que estaban imputadas inicialmente un total de doce personas.
Todo se precipitó después de que un joven, que hoy tiene 24 años, comunicara por carta al Vaticano que había sido víctima de abusos sexuales desde los 14 hasta los 17 por parte de este grupo de religiosos de Granada, lo que motivó que el propio Papa Francisco le llamara para pedirle perdón y ofrecerle su apoyo. Tras la llamada del Papa al joven, éste formalizó una denuncia ante la Fiscalía Superior de Andalucía, que ordenó a la Fiscalía Provincial de Granada interponer 'ipso facto' denuncia contra todos los afectados.
El Papa se pronunció también coincidiendo con la salida a la luz de esos supuestos abusos en un vuelo de regreso a Roma tras su discurso en el Parlamento Europeo en el que señaló que "la verdad es la verdad" y "no debe esconderse". El 'caso Romanones' también provocó una imagen inédita del arzobispo de Granada, Javier Martínez, que se postró en el suelo ante el Altar Mayor de la Catedral para pedir perdón por los "escándalos" que afectaban entonces a la Iglesia.