La Autoridad Portuaria de Sevilla aspira a "revitalizar" el sector naval tras la disolución, fijada para este viernes, de la sociedad de los astilleros sevillanos, para lo cual busca proyectos que quieran asentarse en los terrenos que ha ocupado hasta ahora la factoría de estos trabajadores, y que son de su propiedad.
Así lo ha indicado este miércoles, en declaraciones a Europa Press, el presidente del Puerto de Sevilla, Manuel Fernández, que ha admitido que ya ha mantenido "algunas conversaciones" para ello con distintas empresas, si bien ha querido dejar claro que los trámites para conseguirlo "no son fáciles", de modo que la consecución de ese objetivo "llevará su tiempo".
En cualquier caso, Fernández ha confirmado que, una vez que a partir de este viernes quede liquidada la sociedad de astilleros, desde la Autoridad Portuaria se abrirá "un frente" para encontrar nuevas empresas concesionarias interesadas en ocupar dichos terrenos.
El objetivo prioritario, en todo caso, será "revitalizar la industria naval", sector al que, según ha recordado el presidente del Puerto, es al que ha estado dedicado ese terreno en los últimos años, para lo que también se baraja la posibilidad de atraer otros proyectos "ligados" a dicha industria o "complementarios" a la misma.
De esta manera, Fernández se ha mostrado en sintonía con las reivindicaciones de los trabajadores de astilleros, que este viernes se concentrarán para pedir el mantenimiento del uso industrial de la factoría, si bien ha insistido en señalar que, para ello, tiene que haber "empresas promotoras del sector naval que estén dispuestas a asumir el coste de la concesión" de esos terrenos.
Como se recordará, los últimos 58 trabajadores de astilleros de Sevilla terminaron el 31 de diciembre de 2011 sus contratos, en cumplimiento del expediente de regulación de empleo (ERE) de carácter extintivo, aprobado y autorizado por el Juzgado de lo Mercantil, lo que supuso el cierre de las instalaciones tras casi 60 años de historia de la factoría naval.
Desde entonces los trabajadores y sindicados han estado reclamando que esos barcos en construcción, propiedad de una entidad financiera, fueran terminados en la factoría de Sevilla, pedían que se reactivara la fabricación y terminación de esos barcos y se generara carga de trabajo en Sevilla, además de pedir el mantenimiento del uso industrial de las instalaciones navales.
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