El juzgado penal 3 de Sevilla enjuicia el miércoles a dos atracadores, que se enfrentan a diez años de cárcel cada uno por el robo de un banco en San Juan de Aznalfarache (Sevilla) en el que murió una mujer en el tiroteo posterior entablado con la Policía Local al huir.
Los acusados Francisco R.G. y Juan Marcos G.J. serán juzgados solo por el atraco, ya que la causa contra los dos policías locales autores del tiroteo en el que murió Concepción Barreiro fue archivada al constituir un "caso fortuito" y un "desgraciado suceso", al recibir un impacto en la nuca procedente de una bala que previamente había rebotado en el suelo.
Los atracadores están imputados de un presunto delito de robo con violencia, por el que el fiscal pide para cada uno 5 años de cárcel, otro de atentado, con una condena de tres años, y un tercero de tenencia ilícita de armas, con una petición de dos años.
En todos ellos les aplica la agravante de ser reincidentes y el uso de disfraz.
El atraco ocurrió sobre las 08.45 horas del 25 de mayo de 2012, cuando los dos imputados atracaron una sucursal de la calle Antonio Machado de San Juan de Aznalfarache (Sevilla) pero en el momento de abandonar la oficina fueron interceptados por una patrulla de la Policía Local que estaba casualmente en la zona cuando recibió la alarma.
Cuando los atracadores se dirigían hacia su moto, se entabló un tiroteo en el que murió Concepción Barreiro, de 54 años, una mujer que esperaba en una parada de autobús y que fue alcanzada por una bala de la Policía.
Los agentes declararon que uno de los atracadores les apuntó con una pistola cuando huía del banco y que abrieron fuego cuando oyeron disparos, aunque luego se ha demostrado que la única pistola real que llevaban los ladrones se encasquilló y no llegó a disparar.
La Policía Científica, en su informe de balística, concluyó que los dos policías locales efectuaron respectivamente siete y tres disparos y que la bala que alcanzó a la víctima rebotó 25 metros en el suelo antes de impactar en la mujer.
Este juicio estuvo fijado para el pasado 10 de abril pero se aplazó por la enfermedad de uno de los abogados defensores.