La vivienda correspondiente al número 78 de la calle La Habana, en Alcalá de Guadaíra (Sevilla), ha sido este martes el escenario de un incendio que se ha saldado con la muerte de un niño de seis años, mientras sus padres han resultado heridos de diversa consideración. La Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía investiga las causas del incendio, que podrían estar localizadas en un aparato eléctrico ubicado en la planta baja de la vivienda, concretamente un brasero de resistencia, mientras la madre no habría logrado encontrar las llaves de la casa para escapar junto al niño.

   En concreto, a las 14,32 horas de este martes una persona alertaba a los servicios de urgencia del incendio declarado en esta vivienda. El alertante en cuestión sería el padre de familia, según las fuentes consultadas por Europa Press, y a su llegada a la vivienda, los bomberos se habrían encontrado a la madre y al niño tendidos en el suelo de la planta alta como consecuencia de los efectos del incendio, que habría partido de una carga térmica de no mucha intensidad pero que habría ocasionado la propagación de una gran cantidad de monóxido de carbono.

   La Policía Científica investiga las causas del incendio, que podrían estar localizadas en un aparato eléctrico ubicado en la planta baja de la vivienda, concretamente un brasero de resistencia, según las fuentes consultadas por Europa Press. Los bomberos de Alcalá, por cierto, desplazaron tres vehículos y siete efectivos y llegaron en nueve minutos después de la primera llamada de alerta, apagando con rapidez las llamas de la vivienda, que según ha informado a Europa Press del Ayuntamiento ha quedado muy afectada.

   A partir de ahí, el niño, de seis años de edad, fue trasladado con medidas de soporte vital avanzado a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del hospital infantil del Virgen del Rocío, donde ingresó ya en situación de parada cardiorrespiratoria, extremo que finalmente ha supuesto su muerte.

   La madre, de 46 años, fue evacuada con soporte vital avanzado a la UCI del Hospital de Valme y se encuentra allí ingresada por inhalación de mkonóxido de carbono. Su pronóstico es reservado y está estable. El padre de familia, de 40 años, fue evacuado también al hospital de Valme pero en ambulancia convencional y ha sido atendido en el área de urgencias.