Agentes de paisano de la Unidad de Línea Verde de la Policía Local de Sevilla, cuerpo adscrito a la Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores del Ayuntamiento, han desalojado este viernes por la noche y han precintado tres actividades por "no corregir las infracciones graves a las que habían sido requeridos" mediante resoluciones de la Dirección General de Medio Ambiente del Consistorio hispalense.
Según han informado fuentes municipales a Europa Press, la primera de estas actuaciones se ha llevado a cabo en la calle Julio César, donde un bar con música hacía uso de un limitador de sonido ineficaz, superando los decibelios autorizados.
Asimismo, el establecimiento presentaba varios agujeros de grandes dimensiones en el techo, lo que hacía que "el aislamiento acústico no cumpliera su función". El ruido, por tanto, salía hacia afuera, originando así reiteradas denuncias por parte de los vecinos por las molestias causadas.
El segundo de los precintos se ha realizado un bar de la calle José Recuerda Rubio, que tenía instalados elementos de cocina no autorizados y los vecinos estaban denunciando malos olores permanentes.
El último de los precintos se ha ejecutado en un bar de la carretera de Carmona, que tenía instalados elementos musicales y pantalla de televisión sin autorización. Sobre este establecimiento también constaban denuncias de vecinos por sus molestias de ruidos.
CERRADOS HASTA QUE CORRIJAN DEFICIENCIAS
Estos tres establecimientos deberán permanecer cerrados hasta que sean corregidas sus deficiencias, previa comprobación por los técnicos municipales de Medio Ambiente y autorizado el desprecinto por parte de la Delegación de Seguridad, Movilidad y Fiestas Mayores.
"La actividad empresarial debe desarrollarse siempre con respeto hacia los vecinos del entorno. En estos tres casos, no solo sus actividades eran incompatibles con la convivencia vecinal, fuera por ruidos u olores, sino que, para colmo, se les había advertido de que corrigieran deficiencias y no las habían subsanado. Y con este tipos de conductas, vamos a ser contundentes", ha comentado el delegado del ramo, Juan Carlos Cabrera.
Por otro lado, en la calle Venecia han sido pillados 'in fraganti' los vendedores de un comercio de alimentación que expendían bebidas alcohólicas fuera del horario establecido, siendo esta actividad denunciada y advertida, además, de que la sanción puede llegar a 3.000 euros y un mes de cierre del establecimiento.
