El Juzgado de Instrucción número 15 de Sevilla ha decretado la libertad provisional y con medidas cautelares de uno de los cuatro jóvenes turistas franceses detenidos y encarcelados a comienzos de septiembre, por la presunta agresión sexual perpetrada sobre dos menores de edad que habían conocido en la Alameda de Hércules, según han confirmado a Europa Press fuentes judiciales.
La juez instructora, según tales fuentes, ha ordenado respecto a este investigado la libertad provisional, con la retirada de su pasaporte y la prohibición de salir de España, mientras los restantes encausados están a la espera de que la Audiencia Provincial resuelva sobre su situación.
La investigación comenzó cuando un juzgado de Sevilla instó a la Policía Nacional, en concreto al Grupo de Menores, a averiguar la situación en la que se encontraban dos menores de 15 y 16 años de edad respectivamente, posibles víctimas de una agresión sexual y que estaban en un hospital para ser asistidas facultativamente.
Las primeras diligencias permitieron averiguar que las agresiones sexuales múltiples habrían sido cometidas por cuatro varones de nacionalidad francesa entre 20 y 24 años de edad, que se encontraban en la capital andaluza pasando unos días de vacaciones, toda vez que los presuntos autores de los hechos habrían conocido a las menores en una terraza de la Alameda de Hércules, invitándolas a varias consumiciones de bebidas alcohólicas.
"Desde un primer momento intentaron embaucarlas, invitándolas a una fiesta en el apartamento donde se alojaban, que disponía de una piscina en el ático", agregaba la Policía Nacional en su relato de los hechos, explicando que las menores, "atraídas por la idea" propuesta por los presuntos autores de los hechos, "se desplazaron hasta allí (junto a ellos), donde consumieron más alcohol hasta llegar a un estado de embriaguez y desorientación que aprovecharon los cuatro jóvenes para, presuntamente, agredirlas sexualmente".
Las jóvenes, según la Policía Nacional, "fueron grabadas con un teléfono móvil a pesar de la resistencia física que opusieron para que no sucedieran los hechos".
Las diligencias desplegadas por parte de los investigadores permitieron identificar a los presuntos autores de los hechos y conocer que podrían tener previsto embarcar en un vuelo esa misma tarde con destino a París (Francia), siendo localizados y detenidos, tras lo cual la autoridad judicial decretó su ingreso en prisión.
