El Valencia Basket despidió este viernes la temporada con un nuevo naufragio en una Fonteta que bajó la persiana con una sonora pitada y facilitó el pase a las semifinales por la vía rápida de un Barça que con su solidez defensiva y su buena circulación en ataque le controló en todo momento y que piensa ya en el Unicaja. En los locales las despedidas de Bojan Dubljevic y Martin Hermannson auguran un verano movido.

Las facilidades defensivas que de inicio dio ya el Valencia, falto de cualquier dureza en los contactos, permitió al Barça hacerse con la iniciativa del juego con una certera circulación y buena puntería desde fuera. De nuevo Nikola Mirotic tiró del carro de la anotación blaugrana pero esta vez bien acompañado por Álex Abrines o Nico Laprovittola (8-19, m.6).

Cuando, con la rotación y la entrada de jugadores como Shannon Evans, Jonah Radebaugh, Josep Puerto o Víctor Claver, el Valencia intensificó su defensa era tarde. Sus dudas y la confianza que le había dejado ganar a su rival lastraron su mejoría (13-31, m.12).

Los pitos que Álex Mumbrú ya había oído en la presentación hicieron acto de aparición en la Fonteta. Trataron Puerto y Dubljevic de levantar al equipo pero se les salieron muchos tiros y el efecto en el marcador fue mínimo. Un tiempo muerto de Sarunas Jasikevicius bastó para aclarar las ideas a los suyos y llevar la renta más allá de los veinte puntos de la mano de Kyle Kuric y Nikola Kalinic (20-41, m.17). Sólo la relajación de los visitantes viendo el partido tan plácido hizo que esa ventaja se redujera algo al descanso (26-43, m. 20).

Un triple fallado por los locales y uno metido por Satoransky abrieron el tercer cuarto y avisaron de la que se le podía venir encima al Valencia sino presentaba un intento mínimamente sólido de reacción. Un esforzado Dubljevic, consciente de que podía ser su último choque en la Fonteta tras una etapa de leyenda, trató de ponerlo en marcha pero el Barça supo jugar con sus prisas para machacarle desde la línea de tres (30-52, m.25).

Los minutos cayeron y los locales no encontraban la manera de acercarse. La última bala de un superado Mumbrú fue sacar a Martin Hermannsson en el inicio del último cuarto. Las ganas y la seriedad del islandés le permitieron situar la desventaja en quince puntos pero el Barça no perdió los nervios y supo dejar pasar el tiempo.

El final estaba claro y el técnico local aprovechó para cambiar a Hermannson y Dubljevic ante la posibilidad de que fuera su último choque. Lo fue seguro de Sam Van Rossom y sólo su despedida cortó los gritos de ‘fuera fuera’.

- Ficha técnica:
64.- Valencia Basket (13+13+19+19): Jones (4), Harper (12), Webb III (4), Pradilla (4), Dubljevic (8) -cinco titular- Claver (6), Puerto (5), Radebaugh (2), Ferrando (-), Evans (7), Alexander (2) y Hermannsson (10).
87.- Barça (26+17+24+20): Laprovittola (11), Satoransky (14), Abrines (12), Mirotic (13), Vesely (4) -cinco titular- Sanli (2), Martínez (-), Kalinic (6), Tobey (5), Kuric (11), Jokubaitis (6) y Nnaji (3).
Árbitros: García González, Jiménez y Olivares. Sin eliminados.
Incidencias: segundo partido de los cuartos de final de la Liga Endesa disputado en el pabellón de la Fuente de San Luis ante unos 7.100 espectadores.