El mandatario municipal informó de que el recorte salarial deberá afectar a todos por igual. También trasladó a los agentes sociales su intención de que la rebaja, recogida en el antes mencionado decreto, debe aplicarse por solidaridad también a los empleados de las empresas públicas.
Palma quiere contar para su aplicación con el consenso de los agentes sociales y señaló que espera una respuesta en los próximos días.
Además, afirma, que la propuesta incluye la posibilidad de aplicar un descuento que varíe según las cantidades que perciba cada trabajador, y que vaya paulatinamente en descenso.
La aplicación de las medidas recogidas en el Decreto-Ley 8/ 2010, constituye uno de los pilares básicos donde se asienta el nuevo Plan de Saneamiento de las arcas municipales para este ejercicio. Además, se recogen la reducción de vehículos del Ayuntamiento, reducción del gasto de material escolar, sólo destinado a los que estrictamente lo necesiten; reducción de los servicios de playas a los meses de julio y agosto; analizar los supuestos para posibles prejubilaciones de trabajadores del Ayuntamiento; reducción de contratos de servicios con las diferentes empresas privadas; asumir el Centro Especial de Empleo Amanecer para prestar servicios de manera más económica; sacar a concurso las instalaciones deportivas; reducción del consumo de energía eléctrica mediante un plan especial; y amortizar las plazas de funcionarios que se jubilen este año.
A estas medidas hay que añadir la rebaja del coste político, donde se enmarcan la reducción del 8 por ciento en el sueldo del alcalde, un 7 por ciento las retribuciones de los tenientes de alcalde, un 6 por ciento los concejales y un 5 por ciento el personal de confianza que cobre menos de 24.500 euros anuales.
Con estas medidas, que deben sumarse a las puestas en marcha el año pasado con el primer plan de saneamiento aprobado en Pleno en julio de 2009, se intenta conseguir una reducción de entre el 20 y el 25 por ciento del coste laboral.