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Sir George Martin, el gentleman de los estudios

Si, como se dice, todo lo que quedaba por inventar en la música lo terminaron de inventar los Beatles, fue gracias a él.

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Si pones en Google "George Martin" te saldrán fotos y referencias del autor de la serie Juego de Tronos ( George RR Martin). Tienes que hacer croll con el ratón hasta encontrar al "auténtico" Geoge Martin, el productor y compositor musical, por supuesto.

La primera vez que descubrí su nombre fue cuando empecé a coleccionar los discos de los Beatles, ya que aparecía en todos los créditos de los discos oficiales, a excepción de Let it be. Sin embargo, no fue hasta mediados de los noventa cuando empecé a entender la verdadera dimensión de su papel en la trayectoria de los Fab Four, y fue gracias al imprescindible Anthology, sobre todo en la edición de 8 dvd´s, en la que Martin aparece como una de las acreditadas voces para recrear la trayectoria de los Beatles: pese a los impagables documentos sonoros y gráficos del monumental documental sobre el grupo de Liverpool, son las intervenciones del veterano productor las que le dan sentido a todo, las que confieren autoridad a la verdadera trascendencia de lo que brotó en cada uno de los discos del cuarteto británico. 

Lo primero que te llamaba la atención de George Martin era su porte de gentleman; primero, en las fotos de los estudios de los años 60; después, en las grabaciones de los 90, con su cabellera plateada y la elegancia de su acento británico, pero por encima de todo prevalecía la sensación de estar ante todo un maestro, un tipo excepcional y de exquisitos modales que debió lidiar lo suyo con aquellos cuatro gamberros de inagotable talento para guiarlos por el buen camino. Si, como se dice, todo lo que quedaba por inventar en la música lo terminaron de inventar los Beatles, fue gracias a él.

En otro documental, sobre el making of del álbum In my life, pueden descubrirlo tal como es. Fue un disco producido en 1998 para el que recopiló varios temas de su época junto a los Bealtes, pero interpretados por artistas contemporáneos y estrellas de Hollywood, bajo nuevos arreglos y su dirección musical. Es una pena, no sé si por cuestiones de derecho de imagen, pero no aparece Sean Connery, que interpreta el In my life de Lennon y McCartney para cerrar el disco de forma memorable.

En los últimos años de su vida, Sir George Martin arrastraba ya serios problemas de audición, y cuando le propusieron producir el montaje musical del Circo del Sol sobre los Beatles ya lo hizo acompañado de su hijo: fue uno de sus últimos trabajos y una auténtica delicia en la que sobresale su magistral delicadeza a la hora de mezclar los temas seleccionados.

Produjo a otros muchos artistas y hace poco vi un documental en el que se recrea su aventura en la isla caribeña de Montserrat, donde montó un estudio que terminó arrasado por causas naturales, pero por encima de todo fue el productor de los Beatles, quienes hace unos años -sus supervivientes- incluso renegaron de la versión del Let it be que les produjo Phil Spector para remezclar de nuevo las grabaciones originales.

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