Un compromiso democrático que consiguió aunar, en un mismo objetivo, las voces de 13 formaciones políticas muy dispares, todas legítimas y convencidas de la necesidad de alcanzar para Andalucía una “autonomía de primera”. Un acuerdo histórico y sin precedentes en la historia de España que ayer fue recordado en la ciudad de Antequera con motivo de su trigésimo aniversario.
Los 109 diputados que actualmente integran la Cámara del Parlamento se trasladaron hasta la ciudad del Torcal -escenario de aquellos días- en la real Colegiata de Santa María, donde hace diez años se dieron cita los responsables políticos de entonces para conmemorar la efeméride del veinte aniversario de este pacto.
El Pacto de Antequera fue definido por el historiador Manuel Hijano como el texto más importante de la transición andaluza después del Estatuto, aprobado éste último en 1981. “Sentir Antequera es sentir los gritos de libertad de aquellos años. Sentir la sangre derramada por los andaluces y andaluzas que lucharon por conseguir lo que ahora somos”, resaltó en su discurso institucional la presidenta de la Cámara, Fuensanta Coves, que dio todo el protagonismo a los andaluces que se movilizaron en pro de la autonomía para su región un 4 de diciembre de 1977.
Momentos de reivindicación que dejaron en el camino la vida del malagueño José Manuel García Caparrós, quien fue honrado junto a la última víctima de ETA, el empresario vasco Ignacio Uria Mendizábal, a quien se le dedicó un minuto de silencio.
La convulsión política marcó aquellos años de la transición andaluza. El punto de encuentro parece que fue definido en el Pacto de Antequera al que esta semana se le rindió honores con una sesión extraordinaria del Parlamento, no exenta de polémica, tras las últimas declaraciones de los parlamentarios del PP, que solicitaron “evitar el despilfarro económico” que supone trasladar a todos los diputados fuera de Sevilla, según su presidente, Javier Arenas. “Es importante estar pendiente de lo que les importa a los ciudadanos, y no cargar el ambiente con discursos banales”, sentenció el presidente de la Junta, Manuel Chaves.
La jornada estuvo repleta de símbolos, como el busto de Plácido Fernández Viagas. Otro acto del día fue la inauguración de la Alcazaba por parte de Chaves, que se abrió por primera vez tras ser remodelada. El castillo podrá ser visitado por los vecinos de forma gratuita hasta el próximo mes de febrero. A partir de esa fecha se pondrá en marcha un bono turístico que incluirá la visita a los principales monumentos de la ciudad con un coste más económico. A medio plazo también se prevé iluminar la Alcazaba para iniciar rutas nocturnas.
Las reformas realizadas en el recinto de la Alcazaba durante algo más de dos años han dado un auténtico lavado de cara a esta fortaleza musulmana. El presidente de la Junta no dudó en considerar el castillo árabe como un auténtico “foco de atracción turística”, a la vez que alabó las cualidades patrimoniales de la ciudad de Antequera.
En las obras de reforma y excavación arqueológica del terreno se han invertido más de siete millones de euros por parte distintas administraciones. Las primeras actuaciones en el recinto llegaron de la mano de la Escuela Taller Ribera de la Villa y posteriormente siguieron las obras con el programa Ruta de las Andalucía y la Red de Ciudades Medias. Además, se ha invertido el 1% cultural.