Las listas de espera para ingresar a un mayor en una residencia no han engordado en los últimos años y en pocas residencias se mantiene, habiendo decrecido el interés de las familias por los servicios que ofrecen en sus instalaciones. Así lo asegura el director del centro residencial 'Altos del Jontoya', Juan Cobo, que recuerda que “el interés y las llamadas para preguntar por los servicios” no se producen con tanta continuidad.
Una de las residencias más jóvenes de la capital es la de Caridad y Consolación, con 134 plazas, de las que en sólo un año de funcionamiento se han cubierto un total de 120, según ha confirmado una de sus directoras, Mª Carmen Rubio.
El coste medio por la ocupación de una habitación y sus instalaciones es de más de 1.600 euros, pero los mayores que accedan a una plaza concertada por la Junta de Andalucía abonan el 75% del total de sus ingresos líquidos anuales. En total, la Administración autonómica tiene concertadas 266 plazas en las residencias de la capital, distribuidas de la siguiente forma: Residencia 'Altos del Jontoya' (55 concertadas para usuarios asistidos y 65 para trastornos de conducta), 'La Inmaculada' (20 concertadas), 'Santa Teresa' (92) y 'Sebastian Estepa Llaurens' (42).
Otra fórmula de intervención de la Junta de Andalucía en las residencias de mayores es con una prestación económica vinculada al servicio, que suma 114 plazas. De esta forma, en 'Altos del Jontoya' son 22 plazas para asistidos; en La Inmaculada son 11; en 'Santa Teresa' son 19 plazas; en 'Montesol' son 20; en 'Caridad y Consolación' son 35 y en la de 'Sebastian Estepa Llaurens' un total de siete. Para recibir esta prestación se estudian los ingresos del mayor y su grado de dependencia.
No se han sacado a los mayores
Cuando en el resto de España se han dado casos de familias que se han visto obligadas a sacar a sus mayores de las residencias para llevarlos a casa y subsistir con el dinero que el anciano percibe, en las residencias de la capital no se han dado casos. Así lo han asegurado los responsables de dirección de los centros residenciales, que confirman que hay lista de espera, pero menos interés.
